Delfina Pignatiello cosechó otra medalla de plata: fue segunda en los 400 metros libres en los Juegos Olímpicos de la Juventud

La nadadora Delfina Pignatiello cosechó su segunda medalla de plata en los Juegos Olímpicos de la Juventud: con un registro de 4m10s40/100, terminó segunda en los 400 metros libres de mujeres. La húngara Ajna Kesely volvió a ganar la prueba con un tiempo de 4m7s14/100 y la austríaca Marlene Kahler fue tercera con un registro de 4m12s48/100. Así, se repitió el podio de los 800 metros. La otra argentina, Delfina Dini quedó octava con un tiempo de 4m19s25/100.

Otra vez, el duelo fue entre Pignatiello y Kesely, aunque peligró la segunda posición de la nadadora de San Isidro cuando la austríaca Kahler se le acercó después de los 150 metros. Pignatiello se recuperó pero no llegó a alcanzar a Kesely, que convalidó otra vez su título de candidata.

El mejor tiempo de Delfina Pignatiello en esta prueba es de 4m8s33/100 (lo hizo en el Mundial de Indianápolis 2017). En el caso de Kesely, su mejor registro es 4m3s57/100 (campeonato europeo de este año).

La prueba de 400 metros no es la especialidad de Pignatiello ni tampoco de Dini. Compiten más cómodas en distancias más largas, como los 1500 metros.

"El apoyo de la gente es es muy bueno, y que la gente pueda venir a ver los deportes que normalmente no se ven y aprender de ellos, y los esfuerzos que hacemos día a día. Hay muchos deportes además del fútbol", dijo más temprano Pignatiello sobre el aliento del público en las tribunas. Dos horas antes de su competencia, una fila de 200 metros esperaba por ingresar al natatorio del Parque Roca, donde ingresan 1900 personas en total.

Es hermoso poder compartir estos Juegos Olímpicos. Y tuvimos la suerte de que se hizo en casa y que tengamos toda esta hinchada. Es de las cosas más lindas

Sobre cómo evalúa su condición física y la presión que significó para ella los Juegos, manifestó: "No lo voy a poner como excusa pero las últimas semanas antes de venir estuve con una súper contractura en el hombro, con miedo a que fuera lesión, que al final no lo fue. Fueron nervios y nervios, por lo que está pasando mi familia -su abuela materna falleció la semana pasada-, la presión que yo me ponía por los Juegos. Pero una vez que llegué a la Villa dije 'esto lo tengo que disfrutar, no lo voy a vivir nunca más'. Y me propuse disfrutar y estar mejor. Y el cuerpo empezó a dejar los dolores, a relajar. Los últimos días antes de competir ya estaba más relajada", expresó.

Si bien no bajé los tiempos, porque me preparé más para los 800, creo que hice unos muy buenos. Lo que más me gustó de los Juegos es salir y tener toda esta hinchada