Río 2016: Santiago Grassi, el joven que quiere un curso acelerado en el agua al lado de Phelps

RIO DE JANEIRO.- ¿A los 19 años? Santiago Grassi no tenía en sus planes llegar a los Juegos Olímpicos a esa edad. Fue uno de los protagonistas del suceso de la natación nacional en los Panamericanos de Toronto 2015, un certamen donde la actividad empezó a salir de su largo ostracismo y se subió a tres podios. Al margen de la consagración de Federico Grabich (oro y plata), el santafecino marcó en Canadá su récord de 52s9/100 en los 100 metros mariposa, tiempo que le valió una medalla plateada y el pasaje directo a Río 2016. Este jueves hará su debut olímpico y en la misma prueba en la que competirá Michael Phelps.

“No imaginaba estar acá con 19, sucedió todo muy rápido. Pero cuando logré la clasificación, me dije: 'Bueno, ya que estamos adentro, aprovechemos de entrenarnos y de vivir esta experiencia'. Y no solo de aprender, sino de buscar una muy buena posición, porque siento que no es imposible”, avizora.

-¿Tomás esta participación como un puntapié inicial?

-Sí, la idea es que en Tokio 2020 y a los 23 me sienta con muchas posibilidades, y que en 2024, a los 27, me potencie mucho más. Es sabido que en la natación vas evolucionando hasta cierto punto, y con 27 años alcanzás un punto óptimo. Me tomo mi carrera en forma tranquila, sabiendo que debo caer muchas veces.

-Te toca competir el jueves, ¿cómo llegás?

-Por las sensaciones en el agua, estoy tres veces mejor que en Toronto. Mi cabeza ya va funcionando y creyendo de que voy a bajar ese registro. Tuve más participación en competencias y siento que puedo bajar los 52 segundos en estos Juegos Olímpicos, que es mi gran deseo.

-¿Qué números hacés?

-Con mi tiempo de 52s9/100 estoy 24° en los 100 metros mariposa, y el 16° figura con 51s7. Vamos a esperar, daré mi mejor esfuerzo y que eso me posicione lo mejor posible para llegar con chances a las semifinales. Y no quiero pensar que si no lo consigo será un mal torneo.

-¿Creés que las buenas actuaciones en Toronto funcionaron como un punto de quiebre?

-Sí, resultó un antes y un después para la natación argentina como equipo, porque hubo mucha calidad dentro del seleccionado. Se obtuvieron logros muy buenos, no solo por las medallas, sino también por las finales y los récords argentinos. Habla de una disciplina que está evolucionando, que quizás no está todavía donde nosotros queremos, pero que va por un buen camino.

-Lógicamente tenés un largo trecho de aprendizaje, pero ¿qué cosas te faltan como nadador?

-Sensaciones del agua. Los nadadores decimos que “nos agarramos”. Hasta hace poco veía videos de cómo nadaban Michael Phelps, Chad Le Clos y yo trataba de hacerlo en la pileta. Y siento que voy un poco mejor. La idea es pulir y afianzar tu propio estilo de nado: correr la mano para afuera, en lugar de hacer siete patadas en la vuelta, que sean ocho, sacar un poquito más la largada... Hay tiempo para mejorar.

-Mencionaste a Phelps, que va a participar en los 100 y en los 200 metros mariposa, además de otras dos pruebas. ¿Qué contacto tuviste con él?

-Hace cuatro meses competímos juntos en un Grand Prix de Orlando y ganó la serie. Hoy estará nadando por debajo de los 51 segundos. Pero que pueda tener a mi ídolo al lado y correrle en unos Juegos Olímpicos, para mí es tachar un renglón de todas las cosas que quiero hacer como deportista. Me encantaría encontrármelo de nuevo en la serie, sería una motivación más. Pensar de tenerlo ahí en los últimos 25 metros, a todos nos podría dar un plus de energía. Por una cuestión de tiempos y edad, tengo un rango para bajar más amplio que él.

-¿Pudiste intercambiar algunas palabras en Orlando?

-No, para nada. Quiero una foto con Phelps acá en Río porque es un ejemplo muy grande en el deporte. Además, por muchos años va a seguir siendo el máximo medallista olímpico de la historia. Por ahí, en Orlando estaba muy en su ambiente y me daba no sé qué ir y decirle. Es cuestión de animarse, pero una foto con él, lo vale. Imagino que no me la va a negar...

-¿Por qué Phelps ha hecho tanta diferencia en todos estos años?

-Es un atleta privilegiado en el aspecto físico y nació en un país donde exprimen a los nadadores al máximo. La natación en los Estados Unidos está superevolucionada y es de primer mundo. Entonces se combinaron las dos cosas de manera perfecta.

-¿Y qué hace de distinto en cuanto a la técnica?

-Respira en todas las brazadas, algo que es muy difícil porque generalmente te frena. Pero tiene una elasticidad tan buena que cuando respira no se cansa, porque hace ingresar oxígeno y no se detiene. Yo respiro en una brazada y después hago dos o tres sin respirar. Phelps va muy agarrado sobre el agua, no se desespera tirando brazadas, nada muy calmo y a una velocidad constante, pero rápido...

gs