Pucará aprendió de sus errores

Con Valentín Cruz como figura y una ordenada defensa que supo aguantar la diferencia, Pucará venció al CASI por 23-19 y se repuso de dos caídas consecutivas. Así, el Rojo se mantiene a tiro de la zona de playoffs, que cada vez se aleja más de la Academia.

"¿Cuánto falta?", grita al banco Leandro Urriza. Pucará está ganando, aunque el dominio del CASI en el terreno y los antecedentes recientes del Rojo siembran la duda en el equipo local. No fue sencillo el regreso a la victoria para Pucará. Sus bajas en la línea (Juan Cappiello, Joaquín Paz y Diego Palma, además de Manuel Montero) trajeron consigo un recambio que se intensificó, a la media hora, por lesiones: Federico Torres ingresó por Felipe del Mestre y luego salió reemplazado por Nicolás González Amorosino.

El CASI también llegaba con resultados adversos y ante una oportunidad de revertir su presente. Su destacada performance en el line-out (robó dos en el primer tiempo) lo ayudó a conseguir pelotas de calidad que Juan Ymaz y Ezequiel Valy facturaron en el primer tiempo.

"Estamos aprendiendo", dice Cruz con su habitual serenidad. El Rojo bajó la cantidad de infracciones y no se desesperó por atacar. Matías Romano y Germán Villamil, tras un exquisito rastrón del 10, marcaron los tries del local.

Con orden y la patada de Cruz para resolver problemas en el fondo, Pucará supo mantener la diferencia. Un nuevo triunfo parecía traer aire al equipo de Burzaco. Hasta que los fantasmas aparecieron: Villamil y Urriza lograron tacklear a Franco Fasano, pero la pelota le llegó a Valy, que con aceleración apoyó nuevamente: 23-19, con 10 minutos por jugar, un lapso que fue fatal en el Top 14 para el Rojo, ya que allí perdió sus tres partidos (Atlético del Rosario, Newman y La Plata).

"Quedan dos", le contestan a Urriza, que vuelve al partido para entrar al scrum. Lejos de su in-goal, sin infracciones ni desesperación, Pucará escuchó el pitazo final con la certeza de que, además de haber ganado, entendió las lecciones del pasado.

Plaza sigue prendido

Plaza alimentó sus ansias de clasificación al vencer 24-22 a Alumni. Pese a que el local abrió el marcador, no resistió el envión de los forwards rosarinos y la letal patada de Sebastián Poet. Las tres amarillas tampoco lo ayudaron.