Con coraje y corazón: Delbonis venció a Troicki en cinco sets y puso a la Argentina 2-0 ante Serbia

Con alma de Copa, con el coraje y la fuerza de los que no se dan por vencidos. A los 24 años, Federico Delbonis se anota un éxito grande en la Copa Davis , que pone a la Argentina a un paso de las semifinales, un escenario impensado hace unos días cuando se esperaba la presencia de Novak Djokovic en Tecnópolis.

Delbo, N°77 del ranking mundial, se levantó a tiempo sobre el polvo de ladrillo bajo techo y remontó el partido para vencer a Viktor Troicki , N°20 y la mejor raqueta del equipo serbio, por 2-6, 2-6, 6-4, 6-4 y 6-2 en 3 horas y 27 minutos de juego para dejar 2-0 en favor de la Argentina la serie ante Serbia. En primer turno, Leo Mayer había vencido sin problemas a Filip Krajinovic por 6-4, 6-2 y 6-1.

"Fue muy importante la recuperación, cuando comencé a colocar los golpes en el tercer set me tuve cada vez más confianza"

Mañana, desde las 12, se disputará el dobles, que puede determinar la victoria para la Argentina o que la definición se alargue para los singles del domingo. Aún está en duda la pareja que presentará Daniel Orsanic. En principio, jugarían Carlos Berlocq junto a Diego Schwartzman o Mayer. La dupla serbia sería Zimonjic (N°9 del ranking de dobles) junto a Lajovic.

La Argentina tuvo un día perfecto en Tecnópolis y ya se anima a asomar la cabeza hacia el próximo desafío, las semifinales, que podrían ser ante Bélgica, que se impone por 2-0 tras la primera jornada de acción ante Canadá.

El partido. Parecía sencillo para Troicki poder igualar la serie tras los dos primeros sets, en los que dominó el juego y logró aplacar el ímpetu del público argentino.

Delbonis no podía imponer su potencia y lucía entregado. Sin embargo, a partir de mediados del tercer set comenzó a reaccionar y dio vuelta el desarrollo.

De esa forma primero emparejó el marcador y luego comenzó a tomar ventajas en el set decisivo, ante un rival que se veía desbordado por la potencia del argentino.

Con un saque ganador tras casi tres horas y media de partido, Delbonis pudo asegurar la victoria y se desplomó sobre el polvo de ladrillo para celebrar un triunfo vital para las aspiraciones de su equipo.

Minutos después, fue hacia la tribuna, tomó en brazos a su pequeña hija Celina y se fue hacia los vestuarios bajo la enorme ovación de su público.

ph