Un torneo porteño con acento español

Lejos quedaron aquellos años en que la Legión argentina animaba cada torneo al que asistía. Y más si se traba de certámenes sobre polvo de ladrillo. Actualmente el tenis argentino vive un momento de transición que, en cierto modo, es disimulado, principalmente, por la presencia de Juan Martín del Potro, número siete del mundo. La mejor radiografía que cristaliza esta realidad es el ATP de Buenos Aires. Un torneo que en los últimos años sufrió el dominio de la Armada española.

En la actual edición del ATP porteño ya son cuatro los españoles que se metieron entre los ocho mejores del torneo: David Ferrer, Nicolás Almagro, Tommy Robredo y Albert Ramos. Mientras que el único crédito local que queda con vida en el certamen disputado en el Buenos Aires Lawn Tennis Club es el juvenil Federico Delbonis.

El último campeón argentino en el polvo de ladrillo porteño fue David Nalbandian, quien se coronó en 2008 ante José Acasuso. En aquella edición hubo tres semifinalistas argentinos (el otro fue Juan Ignacio Chela) y el restante había sido el italiano Filippo Volandri. En tanto, el mejor español fue Nicolás Almagro llegando a los cuartos de final y Carlos Moya, uno de los más mimados por el público argentino, no pudo pasar la primera rueda.

Pero apartir de 2009 comenzó la conquista española en suelo argentino. Tommy Robredo se quedó con el título en una emotiva final ante Juan Mónaco y empezaba a marcar un camino que, hasta el día de hoy, sigue siendo guiado por la Armada.

Al año siguiente le tocó el turno al ex número uno del mundo, Juan Carlos Ferrero, quien protagonizó una extraordinaria final ante su compatriota, David Ferrer.

El último argentino en una final de Buenos Aires fue Juan Ignacio Chela, ya retirado, en la edición 2011. El Flaco venia de una muy buena temporada, pero no le alcanzó para vencer a Nicolás Almagro, tal vez uno de los jugadores con mejor rendimiento en los últimos años en el Lawn Tennis, ya que arribó a los cuartos de final de este torneo en las últimas seis ediciones.

En 2012 finalmente David Ferrer se pudo desquitar y le impidió a Almagro retener la corona obtenida un año antes.

En la actual edición, la tendencia marca una gran probabilidad de que se vuelva a repetir la final de la temporada pasada. Aunque hasta el momento no exhibió su mejor tenis, Ferrer marcha como el gran candidato, mientras que Almagro también viene avanzando sin sobresaltos.

El juvenil Federico Delbonis tendrá la presión de mantener a la Argentina con un representante en las instancias finales. Pero en cuartos tendrá, tal vez, su partido más importante nada menos que ante Almagro.

El otro que buscará cortar la hegemonía española será el suizo Stanislas Wawrinka, quien posee un tenis de muy buena calidad, pero hasta el momento no ha tenido actuaciones muy convincentes en Buenos Aires.

Con la ausencia de Juan Mónaco y la temprana eliminación de David Nalbandian, en manos de David Ferrer, la Argentina ahora deposita todas sus ilusiones en Delbonis, un chico que apenas tiene un puñado de partidos ATP en su haber, quien intentara quebrar el reinado español en suelo argentino.