"Sony Ericsson casi se va del país por la ley de electrónicos"

El mayor trabajo de Sebastián Campa en el último año no fue lidiar con la competencia, los costos fijos o el posicionamiento de nuevos productos en el mercado, sino que, como director general de Sony Ericsson en la Argentina, la tarea que absorbió toda su energía fue la de convencer a la casa matriz para que sostuviera su operación local y no levantara campamento luego de la sanción de lo que se conoció como "impuestazo tecnológico".

Según cuenta, la sanción de la ley 26.539, en diciembre de 2009, los llevó a tomar una decisión que va en contra de la estrategia global de Sony Ericsson de centralizar su producción: comenzarán a fabricar en Tierra del Fuego, para no pagar el costo impositivo que la nueva norma fija sobre celulares y otros electrónicos importados.

-¿Cómo está el negocio de Sony Ericsson en la Argentina?

-En 2010 se dieron muchos cambios en la industria, con regulaciones y nuevas condiciones económicas que afectan al negocio. La más notoria fue la conocida como "impuestazo tecnológico", que, entre otros productos, afectó a los teléfonos celulares con un impuesto que antes no tenían. Eso hizo que los diferentes jugadores del sector tomaran diversas decisiones para seguir en carrera. La más estratégica fue la de producir en Tierra del Fuego.

-¿Ustedes ya comienzan?

-Sí, nosotros ya lo decidimos, pero aún analizamos con qué empresa lo vamos a hacer, porque son varias fábricas las que están en condiciones de hacerlo. Lo vamos a definir en los próximos meses, porque queremos producir lo antes posible.

-¿Los perjudica esta ley?

-Y... por cómo funciona Sony Ericsson a nivel global, es un inconveniente esta ley, porque justamente la estrategia de la compañía es centralizar la producción y descentralizar marketing y venta. De hecho, teníamos un par de fábricas en Europa y México, pero las cerramos porque la idea es tener la menor cantidad de plantas posible.

-¿Qué es lo peor de esta ley para ustedes?

-Que fija un beneficio impositivo, pero no de costos, es decir que podés producir lo que quieras, pero sólo vas a ser competitivo acá. Si uno intenta vender en el exterior te termina resultando más caro. Es un beneficio impositivo del que uno puede gozar en la medida en que origine operaciones comerciales dentro del territorio. Nosotros lo llamamos "un viaje de ida", porque sabemos que lo que decidimos producir acá sólo lo podremos vender acá.

-¿Desde la casa central se analizó dejar el país?

-Sí, pero yo defendí a capa y espada la postura de seguir. Dije: "No nos tenemos que ir" y defendí la oficina aquí. Uno siempre hace el "caso de negocios", plantea los números y les muestra lo que puede pasar. Yo mostré que en dos años y medio podríamos recuperar la inversión que nos lleva comenzar a producir en Tierra del Fuego. La empresa a nivel global tiene fondos destinados a inversión en manufactura.

-¿Por más de dos años no van a ganar un peso acá?

-No, no. Vamos a ganar dinero, pero lo que pasa es que el nivel de inversión sale de diferentes bolsillos. Si uno mirara el negocio como algo aislado, podría decir que no ganamos nada en ese tiempo, pero no es así, porque la firma global tiene un dinero para invertir en la operación nuestra acá.

-Bueno, pero gracias a que Sony Ericsson central decidió financiar el negocio aquí...

-Claro, si el dinero lo pusiera la oficina local, deberíamos esperar dos años y medio para ganar un peso, pero como son dos cajas distintas, la ecuación es diferente.

-¿Costó convencerlos?

-Me costó seis meses, porque una vez que convencí a la cúpula, me encontré capas y más capas de gente que me preguntaba por distintos puntos. Así que tuve que explicar varias veces las cosas.

-¿Cuál era la mayor objeción?

-El miedo por la incertidumbre política que hay en el país. "Mirá si hacemos todo esto y dentro de un año vuelve todo para atrás", me decían. Es un viaje de ida, sin red, porque todo lo que fabriquemos lo tendremos que vender acá.

-¿Habrá celulares más baratos, como dice el Gobierno?

-La conclusión es muy fácil: si ponés impuestos más altos a lo que viene de afuera y localmente no creás ningún beneficio de costos, el local va a quedar igual que ahora y el de afuera se va a encarecer.

-¿Por qué perdieron participación en el mercado?

-Por el cambio de la ley y por el cambio estratégico. En 2001 se crea el joint ventures entre Sony y Ericsson, para aportar cada uno lo que mejor sabía: el primero, el entretenimiento, y el segundo, telecomunicaciones. Tuvimos un gran rendimiento hasta 2008, pero tuvimos un crecimiento abrupto y después apostamos hacia un lado y el mercado se movió hacia otro. Apostamos al diseño del producto en sí (calidad de la cámara, del reproductor de música, de los auriculares) y el mercado se fue hacia un producto más económico.

-¿Por qué acá no se puede tener un celular gratis, como en Estados Unidos o Europa?

-Ahí se ve una parte de la película. Tenés un celular gratis, pero tenés un plan más caro que acá. En esos países hay planes de 100 dólares, que acá son imposibles. Pero, además, allá no es como acá, que sólo el que llama paga. Allá pagan todos.

PERFIL

• Estudios : licenciado en Administración de Empresa. Además tiene un MBA en la Universidad de Miami.

• Edad: 39 años

• Origen: Buenos Aires

Ingresó en Marketing Sony en 1997. En 2001, ya gerente del área, fue a EE.UU. para tomar una posición regional. En 2005, regresó a Buenos Aires como director general de Sony Ericsson Argentina.

Por Carlos Manzoni

• Comunidad de Negocios

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