A tres años de la invasión a Ucrania, Trump abre un nuevo mundo para Putin
El presidente de EE.UU. ha impulsado un rápido acercamiento con el Kremlin, dejando de lado a sus atónitos aliados europeos y atacando públicamente a Volodimir Zelensky
7 minutos de lectura'
BERLIN.- El presidente de Rusia, Vladimir Putin, subió al escenario en Sochi el pasado otoño, dos días después de la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, y habló sobre el amanecer de un nuevo orden mundial.
“En cierto sentido”, afirmó Putin, “se acerca el momento de la verdad”.
Es posible que ese momento ya haya llegado.
Tras tres años de una guerra agotadora y del aislamiento impuesto por Occidente, se ha abierto un mundo de nuevas posibilidades para Putin con el cambio de poder en Washington.
Han quedado atrás las declaraciones desde la Sala Este de la Casa Blanca sobre la necesidad de que Estados Unidos enfrente a los opresores, defienda la democracia sobre la autocracia y garantice que la libertad prevalezca. También se ha desmoronado el frente unido de Washington contra Rusia junto con sus aliados europeos, muchos de los cuales comienzan a preguntarse si la nueva administración estadounidense realmente los protegerá de una Moscú revanchista o si incluso mantendrá tropas en Europa.
Trump, quien en el pasado expresó su deseo de adquirir Groenlandia, ha impulsado un rápido acercamiento con el Kremlin, dejando de lado a sus atónitos aliados europeos y atacando públicamente al presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky.
Para Putin, este giro representa un cambio radical en su fortuna. Se atrincheró en el campo de batalla, resistiendo la creciente presión y los costos de la guerra, esperando a que la determinación de Occidente se debilitara en un conflicto mucho más largo y costoso de lo que Moscú había previsto. Ahora, el líder ruso puede considerar que ha llegado su oportunidad de inclinar la balanza de poder a favor del Kremlin, y no solo en Ucrania.
“Creo que ve una oportunidad real, tanto para ganar la guerra en Ucrania como para marginar a Estados Unidos, no solo en Ucrania, sino en toda Europa”, afirmó Max Bergmann, analista de Rusia en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales en Washington y exfuncionario del Departamento de Estado durante la administración de Obama.
Según Bergmann, el “gran objetivo” de Putin es la destrucción de la OTAN, la alianza militar de 32 países liderada por Estados Unidos y creada tras la Segunda Guerra Mundial para proteger a Europa Occidental de la Unión Soviética.
“Creo que eso está ahora sobre la mesa”, añadió.
Este escenario representa una de las mayores oportunidades para Putin en su cuarto de siglo en el poder.
Durante años, el mandatario ruso ha lamentado la debilidad que mostró su país tras la caída de la Unión Soviética y se ha obsesionado con revertir la influencia que Estados Unidos ha ganado en Europa a expensas del Kremlin.
Antes de la invasión de Ucrania hace tres años, Putin presentó a Estados Unidos y sus aliados europeos una serie de demandas que iban mucho más allá del conflicto en Ucrania. Propuso revivir una división de Europa al estilo de la Guerra Fría, con esferas de influencia dominadas por Moscú y Washington.
Exigió que la OTAN se comprometiera a no expandirse más hacia el este, a ninguna nación de la antigua Unión Soviética, incluida Ucrania. También pidió que Estados Unidos y sus aliados de Europa Occidental no desplegaran fuerzas militares ni armamento en los países de Europa Central y Oriental que en su día estuvieron bajo la órbita de Moscú.
Muchos de esos países, como Estonia, Polonia y Rumania, han sido miembros de la OTAN durante décadas y serían difíciles de defender ante una invasión rusa sin la presencia previa de tropas y equipo militar.
“En la visión de Putin, son las naciones más poderosas las que deben definir las reglas del juego”, explicó Angela Stent, profesora emérita de gobierno en la Universidad de Georgetown. “Las naciones más pequeñas, les guste o no, deben acatar esas decisiones”.
Para Putin, poco importa que Rusia no tenga una economía de superpotencia, dijo Stent. “Pero sí tiene armas nucleares, petróleo y gas, y un veto en el Consejo de Seguridad de la ONU”, añadió. “Es solo poder, poder duro”.
En su momento, Occidente rechazó de inmediato las exigencias previas a la guerra de Putin, calificándolas de inaceptables. Ahora, el líder ruso casi con certeza las revivirá en sus inminentes negociaciones con Trump, un viejo escéptico de la OTAN y de la presencia militar de Estados Unidos en Europa. Esta perspectiva ha desatado una crisis entre los aliados europeos, preocupados por lo que el presidente estadounidense pueda ceder.
“Estamos presenciando algo realmente importante”, señaló Lawrence Freedman, profesor emérito de estudios de guerra en el King’s College de Londres. “Esto no es un asunto de rutina. Se trata de una administración muy distinta, y es difícil imaginar que las relaciones transatlánticas sean las mismas cuando esto termine”.
Aun cuando el regreso de Trump ha cambiado el panorama geopolítico en favor de Putin, el líder ruso ha sufrido importantes reveses en los últimos tres años de guerra y aún no ha logrado su objetivo de traer de vuelta a Ucrania bajo la órbita de Moscú.
Si bien Rusia ha logrado avances en el campo de batalla, arrebatando a Ucrania casi 2500 kilómetros cuadrados de territorio el año pasado, todavía no ha logrado ocupar por completo las cuatro regiones ucranianas que el Kremlin declaró “anexadas” en 2022. Y aunque las fuerzas ucranianas enfrentan una grave escasez de personal, Moscú no ha conseguido una gran victoria que provoque el colapso total de las líneas de defensa ucranianas.
Los avances de Putin también han tenido un costo significativo. Rusia sufre pérdidas estimadas entre 1000 y 1500 soldados muertos y heridos al día. Su economía de guerra muestra signos de tensión, con una inflación del 10 %, tasas de interés elevadas y un crecimiento económico tambaleante, a pesar del enorme gasto en defensa. Además, la OTAN ha sumado dos nuevos miembros —Finlandia y Suecia— en el patio trasero de Rusia, lo opuesto a lo que Putin pretendía.
“Si estás en el Kremlin analizando la situación, sí, hay una oportunidad, pero no te hagas demasiadas ilusiones”, advirtió Thomas Graham, miembro del Consejo de Relaciones Exteriores y exasesor principal sobre Rusia en la Casa Blanca durante la administración de George W. Bush. “Las cosas pueden cambiar rápidamente y, al final del día, Trump es impredecible”.
Para poner fin a la guerra, señaló Graham, ambas partes deben aceptar dejar de luchar. Ni Ucrania ni sus aliados europeos aceptarían sin más un acuerdo impuesto por Trump y Putin, por mucho que Washington los presione.
“Esto es mucho más complicado que simplemente Putin y Trump sentados firmando un papel redactado por el Kremlin”, advirtió Graham. “No descorchen el champán en Moscú todavía”.
Trump, además, enfrenta el desafío de que Putin no es una figura popular en Estados Unidos. Cualquier acuerdo que parezca una concesión al Kremlin podría ser difícil de vender en casa, aunque la mayoría de los estadounidenses apoyan una rápida resolución del conflicto, una promesa central en la campaña de Trump.
El entorno informativo también ha cambiado. Medios de derecha, encabezados por el expresentador de Fox News Tucker Carlson, han contribuido a mejorar la percepción de Putin. Mientras tanto, la desinformación favorable al Kremlin ha proliferado en X desde que Elon Musk adquirió la plataforma en 2022.
Putin podría beneficiarse de la incertidumbre en Occidente. “Si son inteligentes, seguirán el consejo de Napoleón: ‘Cuando tu enemigo se destruye a sí mismo, no interfieras’”, concluyó Graham. “Esa, creo, será la estrategia del Kremlin por ahora”.
Por Paul Sonne
Otras noticias de Guerra en Ucrania
¿Guiño a Trump? Putin anuncia una tregua en Ucrania de tres días en una fecha cargada de simbolismo
Negociaciones. La Casa Blanca dice que la semana próxima será “crucial” para un acuerdo sobre la guerra de Ucrania
Cambio de tono. Tras su reunión en el Vaticano, Zelensky se muestra optimista y Trump ahora critica a Putin
- 1
Caos en Irán: una enorme explosión en el puerto de Shahid Rajaee mató a 25 personas e hirió a otras 800
- 2
Un mundo imprevisible y alterado: el abismo que desafía al próximo papa
- 3
Cuándo es el cónclave para el elegir el nuevo Papa
- 4
El Vaticano anuncia que el cónclave para elegir al próximo papa será el 7 de mayo