El rey de Tailandia sigue provocando a los alemanes: ahora pasea con su harén en bicicleta

Instalado desde hace meses en el Grand Hotel Sonnenbichl, ubicado en la estación de esquí Garmisch-Partenkirchen, en Baviera, Alemania, el rey de Tailandia y su harén de veinte concubinas siguen provocando indignación entre las autoridades germanas. En esta ocasión, Rama X salió acompañado de su séquito a andar en bicicleta escoltado por una caravana de seguridad.

En las fotos, publicadas por el diario alemán Bild, se puede ver al rey, llamado Vajiralongkorn, con un par de leggings ciclistas, casco y anteojos de sol pedaleando junto a una mujer que lleva puesto un casco azul. Los rumores indican que sería su nueva favorita.

La estadía del rey de Tailandia en suelo alemán, que cada vez se prolonga más, ha generado una polémica respecto del accionar de las autoridades. De acuerdo con el Bild, Katharina Schulze, líder del grupo parlamentario de los Verdes, le pidió al gobierno de Baviera que explique por qué se le permite a Rama X quedarse en el país en el contexto del coronavirus dado que su viaje no está relacionado con asuntos comerciales. Schulze todavía no recibió respuesta.

Según el Daily Mail, Anton Speer, autoridad del distrito de Garmisch-Partenkirchen, donde se encuentra ubicado el hotel, hizo una preocupante denuncia: "Recibo llamadas de odio y cartas con amenazas de muerte. Llegan de toda Alemania, incluso de Holanda. Muy pocas son de la región. Dicen que Rama debería morir de coronavirus".

La indignación también llegó a las calles a través de la ONG PixelHELPER que, además de pegar carteles contra el tirano sobre la fachada del hotel donde se encuentra, también estuvo haciendo lo mismo en la sede del parlamento alemán, en la Puerta de Brandeburgo y hasta en la casa de Angela Merkel. Desde su cuenta de Twitter, PixelHELPER publica imágenes y relatos de sus iniciativas, entre ellas, un muñeco de Rama X vestido con su habitual traje militar blanco.

Sin hacer caso a las protestas, el rey sigue instalado en el cuarto piso del Gran Hotel donde él y su séquito han dispuesto un campamento. "El espacio se convirtió en el palacio del placer adornado con tesoros y antigüedades de Tailandia. Rama invita a sus concubinas a ganar concursos sexuales. Algunas hacen una gran apuesta con la esperanza de ganar en grande y otras ceden a la presión por miedo a las consecuencias", le contó a Bild el periodista escocés experto en derechos humanos Andrew MacGregor Marshall.

En Alemania también se encuentra su hijo, el príncipe heredero, que creció en soledad en la ciudad de Feldafing retirado de la mirada pública. Dipangkron tiene quince años y, según Bild, es autista y habla alemán mejor que el tailandés.