Tras el Ataque Ochentoso en Arena Beach, que juntó a 10 mil personas, el conductor conversó con RS sobre una faceta de su vida desconocida para algunos.
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El sábado 23 de enero fue uno de los días más calurosos del verano 2010 en Mar del Plata: un auténtico día de playa. También, una de las jornadas con más asistencia de veraneantes a la Ciudad Feliz. Por eso, no debió asombrar a nadie que más de 10 mil personas se dieran cita a partir de las 14 horas a Arena Beach para escuchar en vivo una emisión especial de Basta de todo, con Matías Martin, Gabriel Schultz y Cabito tras los mics. Y a las 16, la fiesta del Ataque Ochentoso: por primera vez en la playa, por primera vez gratis y por primera vez en verano. DJ Cualquiera (el alias de Schultz) abrió la pasada con U2, y pasó Duran Duran, Guns N’ Roses y demás. Posteriormente fue el turno de los Festa Bros., DJ Zuker y el cierre a cargo de DJ Paul.
Tras su set, Gabriel Schultz charló con RS acerca de una faceta para muchos desconocida de su pasado: sus tiempos como disc jockey:
Contanos de tu pasado como disc jockey
Fue mi primer trabajo, a los 17 años. Terminé el secundario, y mi viejo me dijo la típica: "Si querés guita andá a laburar". Entonces los días de semana estudiaba, y los fines de semana pasaba música.
¿En dónde?
En casamientos, fiestas de 15, sobre todo salones de fiestas. Trabajaba en una empresa que se dedicaba a ese palo, y tuve laburo entre los 17 y los 27 años.
¿Y el Ataque Ochentoso tiene que ver con esa etapa de tu vida?
Claro, porque yo comencé a pasar música en 1983. Toda esta música que suena acá es la que yo pasaba. Y un día, jodiendo en la radio, empecé a pegar un par de temas así. La gente murió, quedó como sección, y ahora llegamos a esto.
¿Por qué crees que hay gente que, por motivos de edad, no vivió los 80 y tiene una especie de "nostalgia" por eso que no curtió?
Porque la música de los 80 era música destinada a ser perdurable. En estos últimos tiempos, y en este siglo sobre todo, la música es descartable. No hay bandas que se destacan de la media, y sumale a eso que por los downloads la gente no se compra más discos. Pero pasa por esto que te decía de lo perdurable: fijate que las bandas que llenan estadios son nacidas en los 80. Una banda de los 2000 difícilmente llene un estadio, salvo productos comerciales como los Jonas Brothers.
¿Te quedaste con los vinilos de aquella época?
No, pero los tiene mi hermano en su casa. Como no ejerzo como disk jockey, los tiene él porque me daba mucha lástima tirarlos. Y cuando paso música ahora, como hice en Creamfields, uso CDs.
¿Qué preferís: vinilo, CD o MP3?
El vinilo es lo más grande que hay. Pero como ahora no lo curto, me miento a mí mismo (risas). Para trabajar, el CD es muy cómodo, y el MP3 no.
¿Tenés iPod?
Tengo, y siempre trato de estar al día con las nuevas tecnologías. Pero así y todo te digo que el MP3 es la peor manera de escuchar música.
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