Funk y soul para escaparle al sueño

Los músicos de La Groovísima saben con certeza de la popularidad que genera la televisión. Cada noche, esta banda de soul y funk participa del programa "Duro de acostar", que conduce Roberto Pettinatto, en el cierre de Telefé.

El grupo, con dos años y medio de vida, es casi una rareza dentro del mundo musical. Son conocidos ampliamente sin tener disco alguno. Sin embargo, para mediados de este mes tendrán su primer álbum en la calle, titulado "La Groovísima" .

De la banda formada por el Negro Colombres, en batería; Coco Donelli, en piano; Gaby Lazzarini, en bajo; Damián Formansky, en guitarra, y Oliver, en voz, sólo los dos últimos aparecen por la sala de ensayo, en Palermo Viejo, para dialogar con La Nación sobre el disco.

"Estamos satisfechos por lo conseguido en el álbum; claramente, es lo que sentimos musicalmente", relata Formansky, mientras termina el largo proceso de acomodar amplis y pedaleras.

Los compromisos televisivos y de fines de semana, en los que no faltan los shows, determinaron que se ensaye poco y nada.

"No hay tiempo. Por suerte, para el disco teníamos el material largamente pensado y no nos costó elegir el repertorio", admite el rosarino Oliver.

La banda reconoce como padre musical a James Brown, verdadero "héroe" del soul y del funk. Algo así el Chuck Berry del rock´n´roll, pero con más energía.

"El disco está pensado como un homenaje al soul. Un material cuidado, ya que evitamos caer en versiones vulgares. De los temas que son conocidos hacemos I´m feel good, de Brown, que representa casi un himno", sostiene Furmansky, guitarrista que entre sus variadas influencias aparecen Jimi Hendrix, Jeff Beck, B.B.King...

Chicago, Beatles y King

El disco incluye, por ejemplo, una versión remozada desde el soul de "Saturday in the park", de Chicago; "Sing a simple song", de Sly Stone ; "We can´t work it out", de los Beatles; "Guitar man", un funky del bluesman Albert King;"Superticions", de Steve Wonder, entre otros.

Sólo dos temas del álbum son propios, "Te diré que no", un tradicional rhythm& blues y "Qué es lo que es", un funk típico. Tal mesura a la hora de componer invita a preguntar sus razones.

"Nos conocen por covers; no sería razonable largarse a hacer un discocon temas que nadie escuchó. Pienso que sería decepcionante para quienes nos siguen", señala Oliver.

La ficha técnica del álbum se completa con la participación de un set de bronces integrado por Juan Cruz de Urquiza, en trompeta, y Víctor Skorupsky y el cubano Alex Batista, en saxos, que dejó evidentemente satisfecho al grupo, que los invitará a participar de la presentación del disco.

Furmansky también pone especial énfasis en la participación que tuvieron Litto Nebbia, en un piano eléctrico Fender Rhodes y coros en "Saturday in the park", y de Alejandro Lerner, en órgano Hammond, en "Come on, widdid", otro tema de James Brown.

Aquella noche en El Codo

Ahora bien, la pregunta de rigor es cómo llegan a la televisión.

Oliver explica que uno de los productores de "Duro de acostar" estaba buscando una banda para el programa y una noche, acodado en el mostrador de El Codo, en Almagro, le dijo al barman: "¡Qué buena música pasan acá!", a lo que el mozo le respondió que no era música grabada, sino una banda en vivo, precisamente La Groovísima.

Desde esa noche, a mediados de 1996, se comenzó a tejer la idea de integrarla al proyecto que dirigiría en cámara Pettinatto, otro amante de la música funk.

"Lo bueno es que no nos impusieron hacer tal o cual música. Seguimos tocando lo que nos gusta. Actuamos sin presiones, de ahí que podamos tocar con comodidad", señala Furmansky.

Recuerdan que antes de la televisión fueron también banda estable del Hard Rock Café durante el 95 y 96.

"No somos un producto de la televisión, somos músicos que actuamos en ella", sentencia Furmansky, que siente junto a Oliver que el soul es parte integral de su vida.

Por César Pradines

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