Marcela Tinayre, triste por la salida de Juana Viale del Bailando por un sueño 2015

El resultado fue sorpresivo para muchos: con el 52,05 por ciento de los votos, Celeste Muriega consiguió dejar fuera de juego a Juana Viale , una participante que parecía "intocable" dentro del " Bailando por un sueño 2015 ".

Durante su discurso de despedida, la nieta de Mirtha Legrand contó lo que ya todos intuíamos: que la pasaba muy mal durante las previas, pero que que había aprendido a disfrutar del ensayo y de los bailes y que tenía ganas de seguir adelante en el mediático certamen. Esa sensación, al parecer, fue compartida por su madre, Marcela Tinayre .

Como una suerte de vocera de su arisca hija, la conductora se presentó en piso de Nosotros a la mañana para hablar sobre lo ocurrido anoche en la pista. Y se mostró asombrada por la temprana eliminación de Juanita: "Hace tres años que la buscan en el 'Bailando...' y me sorprendió que la manden al teléfono. Sabemos cómo se maneja todo esto. De todas maneras, fue muy digna. (...) Ella no estaba triste; yo estaba triste porque sé que su sueño, lo único que quería era bailar el aquadance".

Además, Tinayre destacó la estoicidad que mantuvo la participante una vez que supo que iba a la votación telefónica. "Yo sé fehacientemente que, por ejemplo, si mostraba a Ámbar ayer llorando le sumaba votos. Juana dijo que de ninguna manera iba a recurrir a mostrar a su hija por un voto, sólo la quería proteger. Esa es la calidad de persona que es Juana, defensora de sus principios", aseguró.

La conductora también contó algunas intimidades sobre el paso de su hija por el certamen que conduce Marcelo Tinelli. "Varias veces quiso renunciar, pero le pedían que no renuncie. Cuando vio que se metían en chiquitaje de su vida personal, estaba muy irritada con eso porque cómo puede ser que siempre se estén metiendo en la vida personal y no en la profesional", indicó. "Ella sufría más en las previas que en los bailes; sufría porque no tenía mucho que contar".

Por último, opinó sobre las críticas que suele recibir Viale por su negación a hablar de su vida privada. "¿Por qué no aprendemos los argentinos a aceptarnos como somos?", se preguntó. "Me doy cuenta que nadie la conoce realmente a Juana. La gente detrás de cámara y los compañeros la adoran. No salgo en defensa de mi hija, solo quiero decir que permitamos que el otro sea como quiera ser", finalizó.