Andrés Calamaro responde a nuestra entrevista colectiva: "Confiamos en el disco para derrotar al olvido"

En esta tercera entrega de músicos entrevistados por sus propios colegas, Andrés Calamaro contesta todo lo que siempre quisieron preguntarle y hasta aquí no habían podido artistas de varias generaciones como Gillespi, Litto Nebbia, Santiago Motorizado, Rolo (La Beriso), Hilda Lizarazu y Palo Pandolfo, entre otros. Antes de iniciar una "gira de teatros" por España y América latina con su nuevo álbum de piano y voz (ver aparte), Calamaro habla de su amor por el tango y el folklore, de los mejores y peores estados de ánimo para componer, de mutaciones artísticas, del pop español de los 80 y hasta de sus amistades peligrosas.

1 Lucas Marti

a) –¿Qué opinión musical tenés de los grupos españoles pop como Mecano y Olé Olé? ¿Creés que de alguna manera Los Rodríguez desplazaron a todas esas bandas?

–Mecano ya estaba perfectamente establecido –y diluyéndose– cuando Los Rodríguez pintamos algo. Lo cierto es que no desplazamos a nadie porque aparecimos en la curva entre el crepúsculo de los ochenta y los años de una década alternativa. Fuimos buenamente aplastados por el peso específico de la efervescencia de la música ligera y la actitud del movimiento "independiente". Nos conformábamos con "sonar bien", a la antigua, según la noble tradición de las salas de ensayo.

b) –¿Cómo hiciste para conservar tanto material demo como el de grabaciones encontradas?

–Presumo de un archivo que supera lo normal, supongo que el tiempo y la humedad están deteriorando parte de mi música secreta, el olvido hará también su parte. Soy una máquina de grabar al pedo. Lo fui. Puedo volver a serlo y hacerlo, pero de momento prefiero no intentarlo.

2 Gillespi

–En relación con aquellos tangos grabados con Juanjo Domínguez, ¿tenés pensado hacer algún disco versionando folklore argentino?

–Alguna vez escuché que hay "cincuenta maneras de hacer un disco..." Alguna de las "cincuenta maneras" debería enfocarse hacia nuestro folklore, que es tan dulce como interesante y profundo. Mirar hacia adentro de la patria musical y aprender.

3 Litto Nebbia

–¿Por qué creés que es tan importante para nosotros grabar y publicar discos, sean vinilos o CD?

–Por una parte, la grabación es nuestro lienzo, el estudio es nuestro laboratorio donde investigamos en búsqueda de una vacuna que cure la indiferencia y el silencio. Crecimos con los discos, mirando con deseo las vidrieras de las disquerías que florecían en las estaciones de tren –y en las esquinas– como naranjos. Nuestra ambición íntima era llegar a publicar un disco que pueda reunirse entre las bateas con aquellos deseados Long Play. Asumido el reto, confiamos en el disco para derrotar al olvido. Queremos vivir de nuestros inventos y considerarlo un derecho.

4 Abril Sosa

a) –A lo largo de tu vasta carrera has pasado por múltiples y disímiles transformaciones (mutaciones): Los Abuelos, Los Rodríguez, el Andrés de El Salmón, el Andrés del hoy, etc. ¿Qué tan necesarios, importantes e ineludibles fueron esos cambios para vos?

–Cada uno es el laberinto de la música que le resulta interesante y conmovedora y en este contexto nos ofrecemos a un auténtico colapso de ejemplos e influencias; un cierto misterio en el asfalto de nuestras calles nos ha formado elípticos y caleidoscópicos, infieles a un estilo musical propio, telúrico, popular o folklórico. Quizá podría haber cultivado una mayor uniformidad, envidio un poco a los músicos en el mundo que permanecen respetuosos de una senda sonora.

b) –Te oí decir alguna vez que un artista tiene la necesidad de estar en contra de algo, en la medida que esto lo moviliza, lo ayuda a transgredir. ¿Creés que cuando un artista llega a cierta armonía con el mundo que lo rodea, cierta paz y bienestar con el lío de la vida, es cuando su arte está acabado, cuando ya no hay nada más que decir?

–Es posible y sería una sequía respetable. El encuentro con la armonía de vivir es formidable. Merecemos la oportunidad de una vida armónica, austera y cultural; afines a nuestras lecturas, escuchando música, transitando la mañana, eligiendo lo que vamos a comer y durmiendo en paz. Si ocurre que creemos que viviendo esta vida agotamos la vehemencia de nuestro discurso, nos queda responder en el escenario y cantar siempre inspirados. Que la alegría nos derrote si hace falta. De todos modos el mundo siempre nos ofrece un motivo para sacudirse y dar batalla. Ahora estoy escribiendo a diario y firmé unos editoriales literalmente reaccionarios. Me tengo que enfrentar a la corrección política entrecomillada porque persigue la libertad artística con argumentos masoquistas que traslucen una pereza intelectual deleznable.

5 Hilda Lizarazu

–¿Qué hacías cenando con "la Garza" Sosa en una cantina de Palermo? ¿De qué hablaron? ¿Algún nuevo plan? ¿Qué vas a robar?

–¡Caramba! Aquélla fue una formidable cena con Rodolfo Palacio, Jorge Larrosa y "Cacho". Encontramos un destino propio para los bandidos y los cantores. Y fue comer y fue reír. ¡Que para no comer siempre hay tiempo! O lo hubo ya.

6 Santiago Motorizado (El Mató a Un Policía Motorizado)

–¿Cuándo componés más y mejor: cuando estás triste o cuando estás contento?

–Digamos que solucionamos la tristeza con hedonistas arrebatos de alegría feroz. Personalmente y como la mayoría de los músicos de rock, aproveché el insomnio para quedarme en casa escribiendo cien canciones por semana. Donde otros consumen cerveza o bailan, nosotros somos exorcistas catárticos de la risa y la rabia. Para nosotros el rock es eso: tragarse la bronca en una carcajada infernal, escribir una canción inspirada en la cuerda de una guitarra y olvidar recordando.

7 Palo Pandolfo

–¿Cuál fue tu primera producción artística y cómo y de quién aprendiste el oficio?

–No sé si somos verdaderos productores artísticos o musicales; mi andadura en los estudios es intuición y deseo (eso cuando existe el deseo de encerrarse en un estudio a dirigir los sonidos sensibles de una grabación). No mucho antes de grabar juntos con Don Cornelio y la Zona, me confiaron la grabación del segundo álbum de Los Enanitos Verdes con la responsabilidad de explotar sus posibilidades y firmar una producción exitosa porque estaban agotando sus opciones. Fue una auténtica operación del destino, porque fue un disco francamente exitoso en México, en donde tienen una carrera fenomenal al día de hoy. Llegábamos al estudio como bomberos deseando más incendios.

8 Rolo Santorio (La Beriso)

–En una canción de Bohemio decís que los autores en los momentos de melancolía y quizá de profundo dolor escribimos nuestras mejores canciones, pero obviamente el deseo es estar bien espiritual y mentalmente. En esos momentos buenos de tu vida, ¿dónde encontraste la inspiración?

–¡A la miércoles! Soy el típico artesano que necesita involucrarse en temporadas "al límite" para ofrecer días enteros a los artefactos de música, canciones y grabaciones. Creo que la melancolía nos paraliza, pero la soledad es una expresión de libertad que no siempre tiene el crédito que merece. Algunos, simplemente, no sabemos mantener el tipo, y buscamos barrancas desde donde caer rodando y permitimos que la tentación de un olvido encantador nos embarre.