Carlos Rottemberg, papá a los 62: "La beba duerme sobre mi panza"

Llegó Matilda Rottemberg y se revolucionó el avispero o mejor dicho, la vida. La beba, que nació el pasado 9 de mayo con un peso de 3 kilos repartidos en sus flamantes 47 centímetros, coronó la felicidad de la pareja conformada por el empresario Carlos Rottemberg y su mujer Karina Pérez Moretto. "Ella siente que se cumplió aquel augurio de 2013, cuando fuimos una noche a ver Matilda al teatro Cambridge de Londres y al salir de la sala, aún bajo la marquesina, dijo que si alguna vez quedaba embarazada de una nena le pondría Matilda, por cuánto nos gustó aquella obra. Nos reímos porque era una fantasía", comenta Carlos Rottemberg a LA NACION, mientras reparte sus días entre mamaderas y el seguimiento riguroso de cada una de las obras que se presentan en sus teatros porteños.

El empresario está acostumbrado a los estrenos. A los de la escena. Desde ya, a los de la vida personal también. La paternidad acaso sea su producción más perfecta, la que comenzó hace ya 33 años cuando nació Tomás, fruto de su extenso matrimonio con la actriz Linda Peretz. Pero, al igual que los laberínticos pasillos de camarines, la vida también tiene sus vueltas. Y a sus 59 años, Carlitos, como lo llaman todos en el ambiente, fue padre de Nicolás, su segundo hijo. En ese entonces, ya se había separado, en los mejores términos, de su primera mujer, y había conformado una feliz pareja con aquella chica que le aceptó el convite de ir al cine en una trasnoche en la que él cumplía años. "Cuando nació Matilda nos miramos y dijimos que no teníamos los derechos del musical, pero sí a la protagonista". Desear fuerte, con convicción, dicen que hace más cumplible el deseo. Hoy, a sus 62 años, el responsable de darle vida a ilustres edificios teatrales de noble historial en la cultura nacional, es también el artífice de apostar a la vida sin miramientos de edades ni deber ser. A su modo. Con libreto propio.

-¿Cómo es ese día a día junto a Karina, Nicolás y Matilda?

-Nuestra habitación pasó a ser un campamento. El colchón de Nico a un lado y la cuna de Matilda del otro. Sin embargo, la beba duerme sobre mi panza, como también lo hizo Nico en sus primeros días. Al menos una ventaja tiene ser gordo: los bebés creen estar sobre un colchón de agua y duermen más relajados.

-¿Cómo tomó Nicolás la llegada de su hermanita?

-Cuando fuimos al sanatorio, llevamos un caballito de madera comprado de antemano para cuando Nico visitara, por primera vez, a su hermana, a modo de regalo de ella para él. Nico fue con un sonajero para Mati que eligió en una juguetería días antes. Lo llevó Tomás, su hermano de 33 años, quien hizo todo el apoyo externo dedicado a su hermano menor mientras nosotros nos ocupamos de la hermanita recién llegada.

-Una verdadera mise-en-scène anti celos...

-Además Karina colocó portarretratos con fotos de Nicolás en la habitación del sanatorio para que cuando ingresara también se sintiese protagonista. La relación está bárbara, solo que la nena recibe en casa tantos golpes cariñosos de su hermano... pero se los viene bancando bien. [Risas].

-Como sucede con los estrenos, cada experiencia de paternidad es diferente. Ninguno se parece a otro. ¿Cómo se vivió esta vez?

-Cuando Karina quedó embarazada encontramos varias coincidencias de días y fechas en relación al nacimiento de Nicolás en 2016. Por lo pronto, las 40 semanas habituales de gestación determinaban como día probable de parto, como aquella vez, un lunes, ahora para el 20 de mayo. Sabiendo que sería por cesárea programada, tal como sucedió con Nico, y como con él fue definida la fecha por la obstetra Alicia Palant a las 38.3 semanas, el calendario nos indicaba, desde el principio, que podría ser el 9 de mayo, si no surgían contratiempos. Como no los hubo, así se proyectó. Incluso en la hora: Nico nació a las 12.02 y Mati a las 12.00 en punto, ambos en jueves.

-Una verdadera estadística de nursery.

-Me río con mi propia respuesta porque con tanto dato numérico más que un nacimiento parece un bordereaux.

-Siguiendo en el plano personal vinculado a la paternidad, ¿está proyectado el próximo estreno?

-¡Próximo estreno ya no habrá! El 9 de mayo fue la despedida definitiva, se lo hicimos saber al doctor Ramiro Quintana, nuestro médico amigo, enorme artífice de haber logrado con aquel tratamiento anterior agrandar esta familia.