Temporada de ardillas: nueve plantas que ayudan a mantenerlas alejadas del jardín

Con la llegada del otoño boreal, las ardillas se vuelven más activas en su búsqueda de alimentos. En su afán por almacenar comida para el invierno, durante esta época del año, suelen invadir jardines, excavar bulbos y roer plantas. Si bien controlar a toda una población de ardillas es una tarea complicada, hay una solución natural y efectiva para mantenerlas alejadas: plantar especies que, por su olor o sabor, resultan poco atractivas para ellas.

Las ardillas y su comportamiento en los jardines

Las ardillas son animales oportunistas que se alimentan de lo que encuentran a su paso, desde semillas y brotes hasta bulbos de plantas. En su búsqueda de comida, también pueden morder estructuras de madera, plástico e incluso los comederos para pájaros. Durante el otoño, es común verlas más activas excavando agujeros en el césped para esconder semillas y comida que luego consumirán en el invierno.

El desafío de mantener alejadas a estas criaturas puede parecer difícil, pero hay plantas que, debido a su fuerte olor o textura, no les resultan atractivas. Incorporar estas especies al jardín puede ser una forma efectiva de repelerlas sin necesidad de recurrir a productos químicos, se indica desde Southern Living.

Las plantas que ahuyentan ardillas

• Menta: esta planta, conocida por su aroma refrescante, no es del agrado de las ardillas ni de otros roedores. Plantarla alrededor del huerto puede ser una estrategia efectiva, aunque es importante controlar su crecimiento, ya que tiende a expandirse rápidamente.
• Capuchinas: con sus vibrantes colores naranjas y rojos, emiten un fuerte aroma que las ardillas encuentran desagradable. Estas plantas anuales son fáciles de cultivar y pueden colocarse en cualquier rincón del jardín.
• Caléndulas: además de ser muy decorativas, las caléndulas son conocidas por repeler a insectos y roedores. Sus flores de tonos amarillos, naranjas y rojos aportan color y protección natural.
• Alliums: las cebollas ornamentales y cebolletas emiten olores que las ardillas evitan. Son perfectas para combinar con otras plantas comestibles, como los tomates, y así protegerlas.

• Ajo: es otra planta que las ardillas encuentran desagradable. Además, se puede aprovechar en la cocina, por lo que ofrece un doble beneficio.
• Narcisos y jacintos: a diferencia de los tulipanes, que son muy atractivos para las ardillas, los narcisos y jacintos no les resultan apetecibles.
• Pimientos picantes: muchos repelentes comerciales se basan en la capsaicina, un compuesto que se encuentra en los pimientos picantes. Plantar las propias variedades de pimientos no solo dará frutos para la cocina, sino que también mantendrá a las ardillas alejadas.
• Lirio de los valles: esta planta, que crece bien en zonas sombreadas, tiene un aroma fuerte que ahuyenta a las ardillas. Sin embargo, puede propagarse rápidamente, por lo que es importante controlarla.
• Geranios: los geranios no solo aportan color al jardín, sino que también son poco atractivos para las ardillas gracias a sus flores de olor picante y sus hojas vellosas.

Con la incorporación de estas plantas y algunos métodos adicionales de protección como la colocación de redes o mallas protectoras en los bulbos recién plantados, es posible disfrutar de un jardín más seguro, libre de las travesuras de las ardillas.

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