Poné agua a hervir en una olla. Sumergí 30 segundos uno a uno los duraznos, retiralos con espumadera y pasalos a un bol con agua helada. Escurrilos y secalos bien. Pelalos, cortalos por la mitad y descarozalos.
Mezclá el vinagre con todas las especias y llevá al fuego hasta que entre en ebullición. Agregá el azúcar, revolviendo para disolver los granitos.
Dejá hervir 2 minutos, incorporá las mitades de duraznos, bajá la llama y cociná 5 minutos más.
Envasá los duraznos calientes en frascos esterilizados, y volcá sobre ellos el almíbar que quedó en la olla, hervido 3 minutos para que reduzca.
Cerrá bien los frascos y conservá en la heladera. Esperá 2 días antes de consumirlos.
