La torta de maíz Malai es una receta rumana, muy rica, para la hora del té. Es amarilla, suave pero con mucha consistencia y dulce. También se la conoce como Malisnik o como torta de polenta. Se trata de un postre típico en la cocina judía ashkenazí. Es una receta que lleva yogur griego o queso blanco, pero yo no le pongo y queda igualmente muy bien. Te paso mi versión, tal como la hacía mi madre;
Poner la harina en un recipiente, bañarla con el agua hirviendo, pizca de sal, mezclar y dejar enfriar.
Batir los huevos con el azúcar, aceite y vainilla. Agregar a la harina de maíz y mezclar bien.
Tamizar la harina leudante con el bicarbonato, agregar al batido anterior y unir muy bien para integrar los ingredientes, incorporar las pasas de uva y mezclar.
Verter en una tortera de 24 cm de diámetro o en un molde rectangular grande, forrados con papel manteca y pincelados con aceite.
Hornear a temperatura mediana unos 50 minutos o hasta que, al testear, esté cocido. Enfriar y servir.
La torta de maíz Malai queda muy bien presentada si se le espolvorea azúcar impalpable al momento de servir. También se la suele cortar en cuadraditos.
En lugar de harina de maíz tradicional se puede usar polenta para hacer la torta Malai, quedará un poco más crocante.