Aberturas de piso a techo y una malla metálica conforman el juego de tamices que permitió integrar los ambientes al patio delantero y al jardín.
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“Julian y Ailin son clientes jóvenes. Buscaban espacios amplios, integrados, bien conectados con el exterior y materiales como el hormigón, la madera y el hierro negro”, repasa la arquitecta Lucía Rivolta, del Estudio Glad, encargado de materializar el hogar de esta familia de tres.

El desafío principal fue el intento constante de vincular visualmente el jardín delantero, el interior y el jardín posterior manteniendo la privacidad.”
— Arquitecta Lucía Rivolta

Desde el comienzo la idea fue no limitar las dimensiones de las ventanas que daban a la calle. La fachada metálica es la respuesta de la arquitectura a esta premisa.
El patio lateral está pensado como una expansión propia del estar. En palabras de la arquitecta: “Las mallas metálicas, además de otorgar la cualidad de tamiz, buscan ser el lenguaje material con el que la vegetación entra en diálogo con la casa”.
Límite visual, elemento de diseño
El barrio, tranquilo y arbolado, así como las dimensiones del lote, permitieron desarrollar cómodamente una propuesta que respondiera al planteo original: un gran espacio de estar-comedor-cocina abierto hacia el jardín en planta baja y dos cuartos y una suite completa en planta alta. Arriba también se dispuso el lavadero, de modo que el circuito de ropa se resuelve en un mismo nivel.

Diseñada en chapa microperforada, la malla metálica cumple: desde los cuartos se ve hacia afuera sin problemas, pero es ciega en sentido contrario. Además, tamiza la claridad generando atractivos efectos de luz en el interior.
Máxima continuidad

“Pensamos la cocina y sus muebles como una extensión del espacio social, por eso elegimos armar una biblioteca que viene desde la entrada en el mismo tono de madera que la barra y el bajomesada”.

Sin alacenas y revestida con el porcelanato que se aplicó en el piso de toda la planta, la cocina se integra naturalmente al conjunto.

Hacia el jardín
“Otro pedido especial en este proyecto fueron los usos del espacio exterior”, agrega Rivolta y enumera: una galería grande para hacer asados con amigos; un fogonero en el fondo y un banco en el patio delantero.

Un sistema de tensores que se toman de la planta alta evita columnas de carga. “Y la idea de colgar la parrilla... ¡simplemente nos gustó!“, suma Rivolta.
Premisa de todo el proyecto, el concepto in-out se manifiesta en esta galería con el mismo solado que el estar y libre de columnas que interrumpan las vistas.
Sin escalas
El paso que balconea al vacío central distribuye a la suite principal y, hacia el otro extremo, a dos habitaciones que comparten un baño.

Con ventanales al frente y al contrafrente, la suite mira al jardín; además de disfrutar del follaje y el perfume del tilo de la vereda.

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