Antes de la nueva indagatoria, vigilia en apoyo de la joven venezolana drogada y violada

A pesar de la lluvia y el frío, amigos y familiares de la joven de 18 años venezolana abusar sexualmente durante su primer día de trabajo en el local de Balvanera se congregaron ayer al anochecer frente a los Tribunales para pedir justicia, luego de que se conociera que la jueza Karina Zucconi citó a declarar a Irineo Garzón Martínez, el comerciante acusado de drogar a la chica para poder violarla dentro de su local de venta de uniformes médicos situado en Paso 693, en la zona del Once. La indagatoria se realizará este lunes, a las 10, a través de la aplicación Zoom, en un contexto de fuerte presión social debido a que la magistrada, a pesar de la gravedad del delito imputado, resolvió otorgarle la excarcelación.

Las organizaciones de venezolanos radicados en la Argentina habían organizado una vigilia que comenzaría el sábado y se extendería hasta que concluyera la declaración de Garzón Martínez, pero debieron suspenderla por cuestiones climáticas. Sin embargo eso no fue un obstáculo para que muchos manifestantes se reunieran igual para pedirle a la jueza Zucconi la detención del acusado. El caso tomó gran repercusión y cada vez son más las expresiones públicas de solidaridad hacia la joven víctima.

Thays Campos, la madre de la joven, se acercó al lugar a saludar a los concurrentes. Patricia, una amiga que la acompañó, contó a LA NACION: "A pesar de que a Thays la estamos cuidando, le fue imposible no recibir esos abrazos y los gestos de amor de la gente, que se ve identificada con ella y con su dolor". Había colombianos, venezolanos, argentinos e incluso personas que pasaban en auto por allí y frenaron para transmitirle su apoyo.

Desde el entorno de la joven remarcan las numerosas expresiones de solidaridad que reciben diariamente. "Vimos con una sonrisa a la nena después de que le mostramos todo lo que está pasando, con tantos gestos de cariño", relató Patricia.

Durante las marchas, personas a las que no conocían y que no las conocían se acercaron a entregarles sobres con dinero y pañales para adultos, para colaborar ante la difícil situación económica que atraviesa la familia de la víctima. Ellos inmigraron al país durante 2020, llegaron solo con sus pertenencias personales. Vivían en una pensión con los ingresos del día: la madre vendía comidas y el padre arreglaba productos eléctricos; pero recientemente él sufrió un ACV que complicó aún más la situación, razón por la cual la joven se vio obligada a salir en busca de trabajo.

Luego de lo ocurrido, desde el gobierno de la Ciudad y la Defensoría del Pueblo también se pusieron en contacto con la familia para brindarles asistencia, para que puedan tramitar el DNI no contaban con esa documentación), tengan un lugar donde alojarse y reciban algún tipo de asistencia económica.

En Venezuela el caso también tuvo gran repercusión, el viernes Juan Guaidó, presidente encargado y líder opositor venezolano, contó a través de Twitter que había mantenido una conversación con la joven venezolana y dijo: "Son momentos duros, buscan justicia. Todos exigimos justicia, pero sobre todo sanar. No dejemos de alzar la voz, por ella y por los que hoy no pueden".

Asimismo, el miércoles pasado, Diosdado Cabello, uno de los máximos referentes del gobierno de Nicolás Maduro, hizo mención al caso y envió una advertencia al gobierno de Alberto Fernández durante su programa de televisión "Con el mazo dando". Tras relatar el caso, el dirigente hizo referencia a que al acusado lo habían atrapado en flagrancia y, sin embargo, "lo pusieron en libertad porque no tiene antecedentes". Y advirtió: "Ojalá que el gobierno argentino y la Justicia argentina puedan cumplir con el rol que les corresponde".

Lo mismo ocurrió en la Argentina, donde, desde las redes sociales, los principales funcionarios expusieron su preocupación por el caso, tal como ocurrió con el jefe y subjefe del gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli, que, según pudo saber LA NACION, se puso en contacto con la familia de la joven víctima.

La causa, caratulada como "abuso sexual con acceso carnal", está a cargo de la jueza Zucconi, que el lunes (un día y medio después del hecho) le otorgó a Garzón Martínez la excarcelación bajo juramento al entender que "la pena en expectativa de efectivo cumplimiento por sí sola no es obstáculo para que el nombrado no obtenga su libertad".

La magistrada lo procesó por abuso sexual con acceso carnal y le dictó un embargo por 90.000 pesos, pero mantuvo su excarcelación.

Luego de que el viernes se dio a conocer el llamado a indagatoria, Pablo Baqué, abogado querellante, dijo a LA NACION: "Esperamos que la jueza ordene la detención y que no tengamos que esperar tanto tiempo hasta que la Cámara de Apelaciones decida".

El letrado sostuvo que la magistrada "puede evitar el problema que va a tener si se le fuga" Garzón Martínez. La querella plantea serias dudas sobre el arraigo del imputado, dado que no fue posible establecer su paradero, ya que primero dijo que vivía con su hermana en Mataderos, pero ella lo negó. Incluso, los vecinos de ese lugar afirman no conocer al acusado de la violación, según pudo determinar LA NACION durante una recorrida por ese barrio.

Familiares y amigos volverán a concentrarse el lunes temprano frente al Palacio de Tribunales, para exigir, a partir de las 10, hora de comienzo de la indagatoria, "la inmediata detención de Irineo Garzón Martínez".