Una adolescente llevó un arma y más de 150 municiones en su mochila y las ingresó al aula
Según indicó la madre de la chica de 16 años, su hija atraviesa un cuadro de salud mental y acababa de regresar al aula luego de un año sin ir a clases presenciales por un tratamiento
6 minutos de lectura'
Una adolescente de 16 años generó miedo y fue demorada este viernes tras ser descubierta con un arma de fuego y 150 municiones en el interior de la Escuela Secundaria N°26 de Florencio Varela, según informaron fuentes policiales.
El episodio ocurrió cerca de las cuatro de la tarde en el colegio situado en Nueva Delhi 1374. Fue la directora del colegio quien alertó a la policía, que llegó rápidamente al lugar. Allí, los agentes de la Comisaría 3ª recibieron de manos de la autoridad escolar una mochila perteneciente a una alumna de tercer año, identificada por las iniciales M.B.
Al inspeccionar la mochila, los efectivos hallaron una pistola calibre .380 con su respectivo cargador y cuatro balas. Además, había tres cajas con 50 proyectiles cada una.
La madre de la joven acudió de inmediato al establecimiento. De acuerdo con su declaración, su hija se encuentra bajo tratamiento psiquiátrico y acababa de retomar sus estudios tras un año fuera de la escuela. También señaló que el arma pertenecería al padre de la menor.
La fiscal Ana Parodi, del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil, tomó intervención en el caso y ordenó realizar las pericias psicológicas y psiquiátricas necesarias. La investigación apunta a esclarecer cómo la adolescente obtuvo el arma y si existió alguna omisión por parte de su entorno familiar. Asimismo, las autoridades intentan determinar si la estudiante tenía intenciones de llevar a cabo un tiroteo dentro del colegio.

Por su parte, en las redes sociales, padres de algunos de los alumnos que van al colegio municipal se mostraron sorprendidos, preocupados y dieron su versión de los hechos: “La piba es compañera de mi hijo. Un compañero dio aviso a la directora y ella la sacó del aula, después fue a buscar la mochila y llamó a la madre. El arma es del padre, que practica tiro”.
“¡Desde la escuela no nos avisaron nada! La piba los podría haber esperado a la salida y pudo pasar cualquier cosa", afirmó la misma persona que se quejó por el accionar de las autoridades educativas.
Para este lunes se prevé que continúe la investigación judicial, como así también la intervención del Ministerio de Educación provincial que depende de Alberto Sileoni.
Una “broma pesada”
La semana pasada, otro caso conmovió y se investigó como la planificación de un posible ataque a tiros en una escuela de Matheu, en Escobar, por parte de supuestos alumnos del establecimiento educativo. Pero con el avance de las horas y de las pruebas reunidas, se determinó que todo se trataba de una pesada broma.
Así lo informaron a LA NACION fuentes al tanto de la investigación. La pesquisa había comenzado en las últimas horas después de que una preceptora recibiera las capturas de chats de WhatsApp donde se contaban detalles de la planificación del supuesto tiroteo, acompañado del mensaje de una persona que se presentó como madre de un alumno, afirmando tener miedo por ella y su hijo.
Sin embargo, funcionarios de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N°2 del Fuero Penal Juvenil del Departamento Judicial de Zárate-Campana y personal de la comisaría 5a. de Escobar de la policía bonaerense determinaron que los supuestos integrantes del grupo de WhatsApp que planeaban el ataque no eran alumnos de la Escuela de Enseñanza Secundaria N°2 Fray Luis Beltrán de Matheu, y que la persona que se comunicó con la preceptora no fue identificada como madre de un estudiante del establecimiento educativo.
La mentira quedó al descubierto cuando la supuesta denunciante no quiso recibir llamadas de las autoridades de la escuela y solo respondía los mensajes. Aportó los nombres y apellidos de cinco supuestos ideólogos del plan criminal, pero ninguno resultó ser alumnos del establecimiento.
Tras las pruebas reunidas, desde la UFIyJ N°2 del Fuero Penal Juvenil de Zárate-Campana, por el momento no se tomó temperamento alguno.
“Parece que las supuestas planificaciones de tiroteos son los que, en otro momento, eran las falsas amenazas de bomba”, dijeron a LA NACION fuentes judiciales.

Los chats analizados
“El que va a arrugar que salga ya y más vale que no diga nada porque tiro en la frente”, fue uno de los mensajes que adjunto la falsa madre del alumno que se comunicó con la preceptora.
En otro de los mensajes del grupo de WhatsApp que ahora fue investigado por detectives judiciales y policiales, se explicaba: “Vamos a hacerlo en el turno nocturno, hay un par de gilas que quiero bajar”.
A ese chat, otro de los supuestos participantes agregó: “Y acá más les vale que se rescaten todos, en la que nos enteramos que andan corte sapos [sic] contando todo les bajamos la cabeza de un tiro a toda la familia”.
Según las capturas de los chats, a los que tuvo acceso LA NACION, los mensajes donde se anunciaba el plan criminal y enviaban fotos de armas de fuego fueron enviados de madrugada.
“Yo los quiero a todos pillos. Ya tuvimos a uno de los profesores que se hizo el vivo y cobró. Así que rescátense. El viernes a la tarde ya saben dónde nos encontramos. Preparamos todo y arrancamos el tiroteo”, fue otro de los mensajes.
En un chat de una sola una visualización se habrían enviado la fotografías de las armas que había logrado recolectar. “Estas son todas las que tengo, si alguien tiene más, traiga”, fue el texto que acompañaba la imagen.
La persona que se presentó como madre de un alumno le escribió el siguiente mensaje a una de las preceptoras de la escuela: “Me llegaron estas capturas por mi hijo y la verdad que tengo miedo. Mi hijo tiene miedo y no quiere que diga quién le mandó eso. Pero fue un amigo suyo que lo añadió a ese grupo y salió. Y ahora lo tienen amenazado por no querer ser partícipe. Mañana mi hijo va a faltar porque tiene miedo, pero por favor si no van a suspender las clases por los menos avisen en los grupos, así los padres están alerta. Y por favor no mande mi número a ningún lado, porque tengo miedo de que me hagan algo a mí también por mostrarle”, fue el mensaje que recibió la preceptora con las capturas de los chats de la planificación del plan criminal.
Los detectives policiales y judiciales determinaron que el chip para activar la línea telefónica desde la cual se comunicaron con la preceptora fue comprado en un quiosco y era un servicio prepago.

1Los mendocinos detenidos por robar en un shopping de Miami volvieron a la Argentina, pero deben regresar a EE.UU. en enero para una audiencia clave
2Video: las insólitas maniobras con las que un borracho con 2,47 gramos de alcohol en sangre chocó cuatro autos
3Narcopolicía detenida. La oficial sorprendida con 14 kilos de cocaína había trabajado en Asuntos Internos de la PFA
4“Inventar mil historias”: casamientos y residencias para inversionistas, los secretos de la banda que traía ciudadanos árabes por 30.000 dólares




