La ONU y la OPS pidieron "intensificar la prevención del VIH" para evitar nuevas infecciones
Alertaron la falta de acceso a los diferentes métodos de cuidado en toda la región
LA NACIONUn nuevo informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la ONU señala que ampliar el acceso a todas las opciones de prevención del HIV disponibles actualmente puede reducir los nuevos casos de infección por este virus en América Latina y el Caribe, los que se mantienen en 120.000 cada año desde 2010.
Lanzado en vísperas del Día Mundial de Lucha contra el Sida, el informe “Prevención de la infección por el VIH bajo la lupa. Un análisis desde la perspectiva del sector de la salud en América Latina y el Caribe” analiza los avances y desafíos de los sistemas de salud en prevenir la transmisión del VIH.
“El progreso en la lucha contra el sida en la región ha sido importante, con grandes reducciones en las infecciones infantiles, mejoras en el tratamiento y reducción en el número de muertes relacionadas al sida, pero no ha alcanzado todavía el impacto deseable en términos de nuevos casos en los adultos”, afirmó Carissa Etienne, Directora de la OPS, oficina regional para las Américas de la OMS. “Evitar nuevas infecciones requiere intensificar los esfuerzos y que las personas más vulnerables tengan acceso a todas las opciones y nuevas tecnologías de prevención existentes en un entorno libre de discriminación”, manifestó.
El informe recomienda llevar adelante el enfoque de prevención combinada, que basado en evidencia científica, respetando los derechos humanos y libres de discriminación, incluye tres elementos: la oferta amplia de las intervenciones biomédicas más apropiadas a los usuarios, la promoción de comportamientos saludables y el establecimiento de entornos que faciliten el acceso y la práctica de las medidas de prevención.
Según el reporte y datos de ONUSIDA, la mayoría (64%) de los nuevos casos de VIH se dan en gays y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, en trabajadoras sexuales y sus clientes, en mujeres trans, en personas que se inyectan drogas, y en parejas de esos grupos de población clave. Además, un tercio de las nuevas infecciones ocurren en jóvenes de 15 a 24 años.
“Reducir las nuevas infecciones por VIH entre los grupos de población clave y las poblaciones más vulnerables, incluyendo a las mujeres y los jóvenes, demandará acciones de prevención del VIH específicas y de alto impacto, acceso a pruebas, tratamiento para todos, y acciones conjuntas contra la discriminación”, sostuvo el Director regional de ONUSIDA para América Latina y el Caribe, César Núñez. Además, agregó, requerirá “un compromiso inquebrantable con el respeto, la igualdad de género, la protección y la promoción de los derechos humanos, incluyendo el derecho a la salud”.
Cuáles son los métodos de prevención actuales
Actualmente existen numerosas opciones de prevención científicamente comprobadas que los servicios de salud pueden ofrecer a la población para prevenir la infección y proteger su salud. Entre estas medidas figuran algunas nuevas opciones como la prueba autoadministrada del VIH, que puede realizarse en la casa, y la expansión de la oferta del test fuera de los centros de salud.
En Latinoamérica 2 de cada 10 personas con VIH y 4 de cada 10 en el Caribe, desconocen que tienen el virus, datos que muestran una mejoría respecto del año pasado. El diagnóstico temprano mejora la calidad de vida de las personas con VIH y contribuye a la prevención de nuevas infecciones.
Otras recomendaciones son la provisión de profilaxis previa a la exposición o PrEP, para las personas que están en muy alto riesgo de contraer el VIH, y la oferta de la profilaxis posexposición o PEP, para casos de situaciones de emergencia, incluyendo por una relación sexual consentida con una pareja sexual de serología desconocida o positiva. Las Américas ha sido pionera en la realización de investigaciones previas que apoyaron la recomendación de 2015 de la OMS de incorporar la PrEP. Sin embargo, solo tres países de la región la ofrecen actualmente.
El informe propone, además, por la distribución de preservativos y lubricantes, por la oferta de la prueba para sífilis al mismo tiempo que se ofrece la del VIH, y por el acceso universal al tratamiento, algo que mejora significativamente la salud de la persona con VIH y reduce el riesgo de infección a sus parejas. También recomienda llevar actividades comunitarias a cargo de pares, y brindar información y educación sobre salud sexual.
En la publicación se advierte sobre la dependencia de fondos internacionales para llevar adelante acciones de prevención (como la educación por pares y la oferta de preservativos y pruebas por parte de ONG) para los grupos de población clave, y se destaca el papel decisivo de la sociedad civil para lograr que la respuesta a la infección por el VIHsea más efectiva, en particular en el área de la prevención.
En ese sentido, el informe llama a trabajar en alianza entre gobiernos, sociedad civil y organismos internacionales para acelerar la introducción de las nuevas tecnologías de prevención, expandir la oferta de opciones y asegurar el acceso universal a los servicios de prevención del VIH para así reducir las nuevas infecciones y poner fin a la epidemia de sida como problema de salud pública para 2030.
LA NACION