Probamos el GhostWire: Tokyo, el juego que mezcla los tiros con el terror y fantasmas en Japón

Cuando uno piensa en fantasmas y suspenso en los videojuegos, lo primero que se le viene a la mente seguramente es Resident Evil o Silent Hill. Juegos clásicos e históricos que, con sus variaciones, siguen vigentes e inclusive continúan siendo éxitos en ventas, como lo fue el Resident Evil 8, que usó un muy buen mix de shooter con suspenso que sorprendió a la crítica de todo el mundo.

Por ahora sólo disponible en PlayStation 5 y PC, Ghostwire: Tokyo, la nueva creación de Tango Gameworks, de Shinji Mikami (Resident Evil, Dino Crisis), no se parece en nada a Resident Evil, pero a la vez tiene un espíritu similar.

El argumento

Vamos arrancar el juego con nuestro personaje, un joven llamado Akito, tirado en el piso luego de un accidente en plena calle del centro de Shibuya, Tokyo. Cuando recobramos la conciencia nos vamos dando cuenta que algo raro está pasando. La gente está desapareciendo, una neblina está absorbiendo la ciudad y unos extraños seres caminan las calles en busca de sus almas. Somos los únicos humanos vivos en toda la ciudad. Pero por un extraño detalle… estamos vivos porque alguien tomó control de nuestro cuerpo.

En este juego en primera persona vamos a convivir con una relación de amor-odio con nuestro invasor, KeiKei, un investigador que busca respuestas usando nuestro cuerpo. En un principio no sabemos cómo ni por qué, pero él nos enseñará sobre estos poderes y cómo usarlos. Con momentos que te van a recordar a Venom, vamos a empezar a recorrer la ciudad conociendo de a poco los poderes que nos otorga esta posesión, mientras nos cruzamos con terroríficos seres literalmente sacados del folklore y el terror japonés como los Kappa, Kuchisake, Nekomata, Tanuki, Tengo y los terroríficos hombres sin rostro como Slenderman.

El juego coquetea con una sensación entre mundo abierto y semiabierto, donde vamos a tener que ir eliminando la neblina para poder expandir el mapa mediante portales. Estos portales expandirán el área de juego que no solo será por las calles, sino también de manera vertical, por sobre los techos e ingresando a grandes estructuras como shoppings y subtes.

Pero este mundo no es tan lineal. Vamos a tener que convivir y comprender cómo manejarnos entre el plano de los vivos y el de los muertos.

Cómo jugarlo

Su jugabilidad, que va saltando de shooter con poderes (tirás rayos y poderes con las manos) a momentos de tensión y suspenso con exploración, nos va a llevar a ir comprendiendo de a poco de qué se trata el juego, quiénes son los malvados seres y cómo podemos hacer para recuperar a nuestra querida hermana, el motor de la misión de nuestro personaje.

Pero a la hora de enfrentarnos por las calles con estos fantasmas y monstruos, si bien parecerá que es un shooter clásico (con poderes de las manos, a lo Dr Strange) no será tan así. A medida que avancemos vamos a ir desbloqueando más poderes junto con algunas armas, como un arco y flecha. Pero estos poderes requieren una gestión vinculada con la estrategia: los recursos son limitados y los vamos a tener que ir recolectando por toda la ciudad, para luego pensar siempre cómo usarlos en cada enfrentamiento. A los enemigos podemos atacarlos de manera directa, atontarlos y hasta juntarlos en un mismo lugar para quitarles al mismo tiempo su “corazón”, que los dejará fuera de combate y nos permitirá recuperar recursos vitales.

A medida que avanzamos descubriremos más de estos seres y de quién está detrás; en definitiva, de los planes macabros que acabaron con todos los humanos de Japón. Y decimos humanos, porque las que sí se quedaron en la ciudad fueron las mascotas, con las que vamos a poder interactuar; incluso podremos leer sus pensamientos para que nos ayuden a conseguir recompensas o completar misiones secundarias, que estarán distribuidas por el mapa. Estas misiones por fuera de la línea argumental son variadas, algunas con personajes conocidos del folklore, y le dan un golpe de aire fresco al juego, logrando que junto con la verticalidad, las estrategias de ataque y los momentos de suspenso, nunca nos vayamos a aburrir. También tendremos coleccionables, árboles para desbloquear mejoras y poderes, y hasta una mega misión de recuperar 243.000 almas por todo el mapa, para luego enviarlas desde un teléfono público hasta la redención (si, un teléfono público).

Qué impresión deja

El juego es divertido, variado y atrapante, y lo pueden disfrutar los amantes del terror, de la exploración y también los que les gusta el combate frenético. El juego tiene de todo; quizás peca un poco de simple en su mundo abierto, pero eso no quita que sus misiones, tanto abiertas como de “pasillos”, se sientan siempre distintas, y nos dejen la sensación de que siempre nos van a sorprender.