Cuando se lanzó en 2015, subió la vara en el segmento de los B-SUV; ahora, se renueva para seguir bien arriba en el mercado
Todos los modelos tienen su ciclo de vida. En la mitad de ese período (más o menos unos tres o cuatro años) se les suele realizar un restyling, es decir retoques estéticos y de equipamiento para "extenderle" la vigencia hasta que se lance una nueva generación o se discontinúe.
Lo cierto es que este rediseño de "media vida" le llegó al SUV Honda HR-V (que acaba de ser puesto a la venta), siempre fabricado en Campana, cuya primera versión se lanzó en la Argentina a fines de 2015. Plataforma, estructura, buena parte del diseño y mecánica se mantienen sin alteraciones en este face lift 2019.
Los cambios estéticos exteriores son sutiles: el más significativo es el de las llantas de 17", de carácter más deportivo (con rayos diamantados y fondo oscuro). También se modificó la parrilla frontal (cromada, más ancha y llamativa), que se fusiona con los faros rasgados con ópticas dobles (halógenas) y luces diurnas de LED. Por su parte, los traseros agregan dos listones horizontales de LED (para las luces de stop) y fondo oscurecido. El resto, sin modificaciones.
En el interior, los cambios pasan por las nuevas butacas delanteras (muy confortables y de buena sujeción), que en la versión tope de gama ELX, que probamos, cuenta con cuero perforado y costuras dobles (en el resto de la línea es de tela). En toda la gama también se aplicó el revestimiento Piano Black y nuevos portavasos en la consola central, mientras que en la ELX son cromados los aros de las manijas internas y los parlantes. Este HR-V ELX incluye el renovado panel de instrumentos Triple Ring Ambient Meter (de fácil y rápida lectura), con tres arcos iluminados para el velocímetro central, el tacómetro a la izquierda y la computadora de viaje a la derecha (se combinan instrumentos analógicos y digitales), que se comanda con un pulsador en el propio tablero (arriba y medio escondido, lo que no es muy cómodo).
Menos visible, pero muy importante es la insonorización del habitáculo, gracias a nuevos aislantes acústicos, que redujeron significativamente el ruido, sobre todo al acelerar, respecto de la versión anterior.
En lo que respecta al equipamiento, esta versión EXL (y también la EX) incorpora climatizador automático monozona, de uso práctico (es digital y táctil) y muy buen funcionamiento, y la función Tilt Down en el retrovisor derecho (se baja en forma automática al engranar la marcha atrás para que veamos el cordón).
La pantalla de 7" central, del tipo táctil, también es nueva y el sistema multimedia es muy completo: dos puertos USB (a cada lado de la alta consola central), lo que permite utilizar el celular y un pendrive a la vez, Bluetooth, protocolos CarPlay y AndroidAuto, navegador, las imágenes de la cámara de retroceso (de guías fijas, aunque con tres ángulos de visualización; eso sí, no tiene sensores sonoros).
En suma, un interior de diseño aún más agradable, muy ergonómico, seguro (este HR-V full cuenta con airbags frontales, laterales y de cortina, más anclajes Isofix) y con una muy buena calidad percibida en los materiales y terminaciones.
Como se dijo, el resto del vehículo sigue igual. Solo creció 3,5 cm de longitud (ahora 4,329 m, por 1,772 de ancho y 1,586 m de alto, más una extensa distancia entre ejes de 2,61 m) por lo que en nada se modificó la excelente habitabilidad del modelo (incluido el baúl de buenos 437 L), siempre realzada por la modularidad del asiento trasero ULT (Utility, Tall, Long) que, en resumen, permite modificar el interior para confort de los pasajeros o aumentar el espacio para la carga, incluidos objetos largos.
La posición de manejo es muy fácil de ajustar (no queda alta como en otros SUV) por las regulaciones de la butaca y del volante multifunción, que ajusta en altura y profundidad, y tiene los comandos del audio y el control de velocidad de crucero a los lados del centro y el manos libres en el "rayo" inferior.
La mecánica (única para toda la gama) tampoco cambió: sigue con las muy buenas prestaciones, agilidad (en todas las situaciones) y confiabilidad de la combinación del motor 1.8 L 16 válvulas con sistema i-VTEC, que desarrolla 140 CV a 6500 rpm de potencia máxima y 17,5 kgm a 4300 rpm de par, con de la muy eficiente caja de velocidades automática CVT (variable continua), que ofrece un funcionamiento fluido, suave y muy rápido para lo usual entre estas transmisiones. La tracción es delantera; la gama no tiene versiones 4x4.
Este HR-V tiene además modo Sport o manual-secuencial (con levas al volante) para comandar las 7 marchas fijas. Así, acelera de 0 a 100 km/h en 9,5 s; de 0 a 400 m en 17 s; de 0 a 1000 m en 30,9 s, y de 80 a 120 km/h en 6,9 s. Es decir, suficiente reacción para conducir en la ruta sin sobresaltos. Los consumos son buenos para el tipo de mecánica: 10,8 L/100 km en ciudad y 8,2 en ruta a 120 km/h. La caja dispone de la función Hold Brake, que retiene el vehículo parado en el modo Drive.
El gran balance de las suspensiones produce que este HR-V ofrezca un muy buen confort de marcha urbano y también un adecuado comportamiento dinámico en ruta, donde se muestra muy franco y estable. Para ayudar al conductor cuenta con un gran poder de frenos (100 km/h a 0 en 40 m), control electrónico de estabilidad y tracción (VSA, para Honda), una excelente dirección progresiva con asistencia eléctrica, asistente de arranque en pendiente (HSA) y freno de mano eléctrico (muy confortable). No en vano, el HR-V tiene 5 estrellas de Latin N-CAP. Este HR-V ELX tiene un precio de $1.050.000 y la LX, de entrada de gama, cuesta $895.000. muestra a las claras.