

Encontrá resultados de fútbol en vivo, los próximos partidos, las tablas de posiciones, y todas las estadísticas de los principales torneos del mundo.

LeBron James y los 25 peores traidores de la historia del deporte", tituló el sitio Bleacher Report en 2010. La lista, atada a la actualidad y con cierto guiño a los fanáticos de Cleveland, lo ubicaba en el primer lugar. "Dice que se va a Miami para tratar de ganar. Eso no es cierto. Le mostró al mundo que tiene un ego enorme", escribieron.
Elegido como N° 1 del Draft por Cleveland Cavaliers , el chico de Akron llevó a los Cavs a la final 2007 de la NBA , pero después decidió marcharse a Florida, donde festejó en 2012 y 2013. Hasta que un día, eligió volver a casa.
"Papá, ¿esto significa que puedo llevar finalmente mi camiseta de LeBron otra vez?". "Sí, hijo. ¡Sí!" El diálogo entre Dan Gilbert, dueño de los Cleveland Cavaliers, y su hijo de ocho años (relatada en Twitter por el propio Gilbert), fue parte de un regreso que sorprendió a propios y extraños. Atrás quedaban las imágenes de fanáticos prendiendo fuego camisetas con el 23 de James o los carteles que hacían juego con sus iniciales, como el de "LB, Liar Baby" (Bebé mentiroso). "¿Qué debo hacer?", se preguntaba The King desde una publicidad de Nike. "¿Debo ser quien quieres que sea?", decía. Ante las críticas, aparecía la pregunta como respuesta.
El regreso en 2014 volvió a poner a Cleveland en los primeros planos. Resignó algo de dinero y prometió un título con los Cavs. Lejos del mote de "traidor", lo recibieron con los brazos abiertos y se ilusionaron con romper la sequía histórica. El primer paso llegó en las finales de 2015, donde perdieron ante Golden State Warriors. Pero un año después, llegó el desahogo ante el mismo rival. Dejando atrás el 1-3 en las finales y haciendo trizas el famoso "mejor récord de la temporada regular" de los Warriors de Stephen Curry y compañía.
Ayer, James completó su gran sueño y promesa de darle un título de campeones de la NBA a los Cavaliers, después de ganar el séptimo y decisivo partido de las Finales por 93-89. "Estoy contento por ser parte de la historia", expresó. "Estoy en casa, estoy en casa. No tengo palabras. Esto es increíble", agregó. Como para despejar dudas de cuál es su lugar en el mundo.
Fue una exhibición de fuerza, poder, inspiración y sobre todo liderazgo en los momentos decisivos de la toda la serie, pero especialmente cuando estuvieron abajo 1-3 en la eliminatoria y con sus 41 puntos en los partidos quinto y sexto, LeBron cambió la historia de la competición.¡Cleveland, esto es para ti!", gritó James durante la entrevista que le realizaron en la cancha después del encuentro. Poco después, se le nombró el Jugador Más Valioso (MVP) de la final, un reconocimiento que obtuvo por tercera vez en su carrera, pero esta vez de forma unánime.

Terminó la sequía de 52 años sin un título deportivo que pesaba sobre Cleveland durante generaciones y que se hacía más dolorosa por una larga lista de situaciones en que distintos equipos se quedaron a un paso de la gloria. En el Día del Padre, LeBron James, el chico de la cercana localidad de Akron, criado por una madre soltera, trajo al fin un título a la ciudad.
La última vez que un equipo de Cleveland había conseguido un título deportivo importante fue en 1964, cuando los Browns fueron campeones de la NFL. Pero los Cavaliers consiguieron algo más. Son el primer equipo de la historia que ha ganado una final en la que estuvo abajo por 3-1. A las 10:37 de la noche (hora local), Cleveland exorcizó finalmente sus demonios deportivos de la mano del hombre por el que desvivieron, por el que odiaron y por el que ahora sellaron un amor eterno.
js


