Maidana: "Estoy seguro de que si lo calzo a Mayweather con una mano justa, se cae"

El sol no se apiada. No es su costumbre por esa zona de Estados Unidos en esta época del año. Los rayos pegan de lleno en la costa oeste. Los fahrenheit se fusionan con los celsius para dictaminar un fallo simple, que no necesita cuentas: el calor es infernal. Los Rolls Royce se confunden con las limusinas, mientras algunas voces latinas retumban por las calles angostas de la capital de la fresa. Oxnard está que arde. Allí, en un confortable gimnasio, Marcos René Maidana afina los detalles de su preparación puertas adentro a puro golpe. Para él, durante estos dos meses lejos de Margarita, no hubo noches sin insomnios, ni pensamientos huérfanos de futuro. Los planes se entremezclan con las sensaciones. Su cuerpo y su mente, a horas de viajar a Las Vegas, están a flor de piel en la gran revancha de su vida, la del próximo sábado, en el MGM Grand ante el estadounidense Floyd Mayweather , por las coronas welter (AMB y CMB) y super welter (CMB). "No veo la hora de subir al ring y pegarle hasta cansarme. Quiero hacer historia", lanza apenas arranca el diálogo telefónico con la nacion

-¿Cómo estás a siete días del gran combate?

-Estoy con hambre de revancha, pero con los pies sobre la tierra. Cada vuelta a Oxnard me conecta con el boxeo, me siento muy cómodo acá. Estoy muy fuerte física y anímicamente. Hice una preparación a conciencia. Apenas estoy menos de un kilo arriba de la categoría.

-¿Y cómo se hace para ganarle a un monstruo como Mayweather, invicto en 46 peleas?

-Con una buena condición física todo se puede lograr. Hay que hostigarlo mucho. Sé que noquearlo es muy difícil, porque se defiende bien, pero espero que se pare a pelear como un hombre y que no corra

-Antes de la primera pelea dijiste que no le veías fallas. Ahora que ya lo enfrentaste, ¿le encontraste alguna?

-Me di cuenta de que no le gusta que le peguen. Aguanta poco. Estoy seguro de que si lo calzo con una mano justa, se cae.

-¿Cómo vas a tratar de controlar la distancia con Floyd?

-La idea es tirar muchos golpes rectos y tratar de mantener el ritmo los 12 asaltos si es necesario. Golpeando al cuerpo con precisión en algún momento la cabeza va a caer sola

Durante ocho semanas la rutina arrancó bien temprano para el Chino. A las 6 de la mañana partía a la playa con el mexicano Miguel Robles, su nuevo preparador físico, y su primo Martín "Pileta" Gómez. Ropa deportiva, faja de goma, toalla al cuello y a correr 40 minutos por la costa de Oxnard. A las 7, cuando volvía al gimnasio, completaba el primer turno de entrenamiento con pesas y trabajos corporales. Por la tarde, después del almuerzo y la relajadora siesta, se estiraban las cuerdas del ring y se encontraba con los sparrings. En ese preciso momento aprovechaba para convocar de manera imaginaria la figura de Money y aporrearla durante 10 intensos rounds. "Muchas veces me olvidaba de que estaba guanteando con compañeros y se me iba un poquito la fuerza, ja", confiesa Marcos, quien pasado mañana arribará a la ciudad del pecado con todo su team.

-¿Qué cambió Raúl Robles en la preparación física con respecto a lo que venías haciendo con Alex Ariza?

-Tiene métodos más tradicionales que Alex porque es un tipo que está acostumbrado a preparar sólo boxeadores. Sabe lo que necesita un boxeador. Estuve trabajando con una máscara que sirve para reducir el aire; cuando te sacás eso, el cambio es tremendo y no te fatigás tan rápido.

-¿Pensás repetir la estrategia de la anterior pelea?

-No. Vamos a trabajar sobre la misma idea, pero mejorando algunos errores que no me permitieron ganar. Debo ser realista: más allá de que fue una muy buena pelea, no todo salió como lo deseaba porque perdí. Algo hice mal. No tengo dudas de que el 13 de septiembre se verá una verdadera guerra.

-Dicen que las segundas partes nunca son tan buenas

-Yo estoy dispuesto a dejar todo. No creo que tenga otra oportunidad de pelear con el mejor boxeador libra por libra de los últimos 10 años.

-¿Sos el boxeador argentino más importante del momento?

-Eso lo dicen ustedes, los periodistas, pero estoy tranquilo. Yo creo que ganándole a Mayweather sería el número uno de verdad.

-En cuanto a la repercusión popular, hay un antes y un después de la pelea con Adrien Broner.

-A partir de Broner, mi nombre empezó a conocerse más. Muchos pensaron que no lo iba a poder vencer porque técnicamente era superior que yo. Pero se equivocaron porque técnica no tengo mucha, pero huevos me sobran

-Pero desde que estás con Robert García mejoraste y te revalorizaste como boxeador...

-Mi gran cambio es la condición técnica y física que adquirí en estos años que trabajo con Robert García. Yo siempre me caractericé por ser un peleador con manos pesadas, que iba al frente hasta fundirme. Ahora aprendí a dosificar las fuerzas y mantener la guardia bien cerrada.

-¿Qué es más difícil: ganarle al Mayweather técnico o al inteligente?

-Mayweather es un talentoso que cuando se las ve feas, apela a su inteligencia para ensuciar la pelea. Es un fenómeno, pero no invencible.

Si un boxeador fuera medido apenas por la confianza en sus fuerzas, nadie podría torcerle el brazo a Marcos Maidana. Y aunque la fe no gana peleas, en este deporte goza de una vital importancia. El Chino, a los 31 años y un récord de 35 victorias (31 KO) y cuatro derrotas, es consciente de esta ley. Por eso se encarga de aclarar que "si llegué a pelear dos veces con Mayweather en cuatro meses es porque mentalmente soy más fuerte que todos".

-¿Por qué pensás que te dio la revancha y no eligió otro rival?

-Es la segunda vez que le da la revancha a alguien. Eso deja en claro que, más allá del negocio económico, yo le sirvo para su prestigio.

-¿Floyd pensará que esta vez te ganará más fácil?

-¡Qué se yo! Sí, puede ser, después de todo es lo mismo que decía en la primera. Es un gran boxeador, pero como ya nos conocemos, a lo mejor la cosa cambia.

-¿Y si perdés?

-No hay drama. Mis hijos me van a querer igual.