

Encontrá resultados de fútbol en vivo, los próximos partidos, las tablas de posiciones, y todas las estadísticas de los principales torneos del mundo.


Con la reactivación del FIFAGate y la detención esta mañana en Zúrich de su presidente, el paraguayo Juan Angel Napout, el escenario actual de Conmebol demuestra un vacío de poder absoluto. Sólo el uruguayo Wilmar Valdez vicepresidente primero y que asumirá la presidencia interina, está firme en su cargo y no está investigado ni fue detenido por el FIFAgate. El cartel de 'Recalculando' o 'En reconstrucción' sería el más adecuado para una Conmebol que en su última reunión de Comité Ejecutivo, la semana pasada en Río de Janeiro, mantuvo un alerta roja ante posibles nuevas detenciones.
Hoy, cayó Napout. Antes, el vice segundo, el colombiano Bedoya, quien fue a declarar a Estados Unidos. Los representantes ante FIFA, el chileno Jadue (renunció a su cargo) y el brasileño Marco Polo del Nero, están bajo sospecha. El tesorero, el boliviano Carlos Chávez, está preso en su país, mientras que José Luis Meiszner, secretario general, acaba de renunciar a su cargo, y también cayó sobre él el predido de captura internacional de la justicia de Estados Unidos. El representante argentino en Conmebol es Luis Segura, actual presidente de la AFA, pero no tiene cargo firme. Es tesorero interino.


Ante este escenario, el
hoy presenta a un vicepresidente como el uruguayo Wilmar Valdez, que hoy asume la presidencia interina ante la detención de Napout y ningún otro cargo ejecutivo firme. Con dos vicepresidencias vacantes y dos cargos de representación ante la FIFA no ratificados -uno de los propuestos es el brasileño José Sarney-, la Confederación Sudamericana desde hoy tampoco tiene Secretario General.
<b>Tercer presidente de la Concacaf detenido por el FIFAGate. </b>
fc/ph



