Con tiernas fotos, Eugenia Tobal mostró a su hija en la playa y sorprendió a todos con lo grande que está

La vida de Eugenia Tobal dio un giro muy especial cuando el 14 de diciembre del año 2019 llegó Ema, su primera hija fruto de su amor con Francisco García Ibar. Desde ese momento, la pequeña se convirtió en su tesoro más preciado. Solo hace falta visualizar sus redes sociales -las cuales están envueltas con fotos de la niña- para confirmar el inmensurable amor que siente. En medio de su descanso luego del cierre de su programa Hogar dulce hogar (eltrece), la actriz le dedicó unas dulces palabras en Instagram, en las que le agradeció a la vida por la bendición de tenerla.

“Te miro y no puedo dejar de hacerlo. Me quedo embelesada con vos. Mi niña angelada”, fue el comentario con el que Tobal acompañó a las cuatro postales en las que se funde en abrazos con su hija. En una fotografía se luce la niña de dos años mirando hacia el horizonte y en otras se encuentra en los brazos de su mamá a orillas del mar.

A raíz de su posteo, muchos amigos de la conductora dejaron elogios a través de mensajes. La actriz Paola Krum expresó: “Ay por favor, no te puedo explicar lo que me pasa con ella”. En tanto que Eleonora Wexler escribió: “Me mata Ema”. Entre otras amigas, fue Nydia Dulce quien destacó: “Es que ella paraliza cualquier alma. Qué bien les sienta la inmensidad del mar”.

Además de los mensajes de los famosos, fueron varios los seguidores de la artista que la elogiaron y también destacaron el presente que vive. “Tardó en llegar, pero hoy se las ve felices”, “Son tan para cual, te felicito Eugenia”, “Emma es la hija más deseada, no solo por vos sino que todos queríamos que puedas tener a tu bebé. Es muy hermosa”, dijeron algunos.

El posteo se dio luego de que hace tan solo dos meses la actriz presentara a la nena en su debut como conductora en el ciclo dedicado a la decoración de interiores y arreglos hogareños. Si bien el programa se despidió fugazmente de la pantalla de eltrece el pasado 12 de febrero por el bajo el rating, Eugenia se llevó uno de los recuerdos más preciados: allí realizó la primera aparición de Ema en pantalla.

En pleno programa, Tobal entró cargando a la niña en brazos y con una gigantesca sonrisa que no se le borraba del rostro. “¿Querés que saludemos a los chicos? ¿Acá querías entrar? ¡Wow! Estamos en la casa de mamá”, expresó la conductora dirigiéndose a su hija. A medida que Ema exploraba el estudio, cada uno de los participantes se derretía ante su cara sorprendida y curiosa. “Quería conocer Hogar dulce hogar y visitarlos a ustedes así que acá estamos”, destacó.

Sin miedo a dar a conocer todas las emociones que estaba atravesando, reveló: “Estoy temblando de emoción”. A fin de aclarar el motivo de sus nervios, añadió: “Está siendo presentada en sociedad en Hogar dulce hogar porque es la primera vez que sale en televisión”.

La actriz nunca ocultó sus fervientes deseos de convertirse en mamá. Pero, a pesar de quererlo con toda el alma, el tan ansiado momento parecía no suceder nunca. Finalmente, a los 44 años y felizmente en pareja, Ema apareció para transformar su vida. Si bien el camino hasta ese punto no fue nada fácil ya que sufrió de trombofilia, hoy en día disfruta mucho de ser mamá y en diálogo con LA NACION abrió sus sentimientos y se refirió de lleno sobre la maternidad.

“Hay que contar todo sobre la maternidad y próximamente va a haber novedades sobre eso. Todavía no puedo decir nada pero estoy trabajando en el tema. Creo que la maternidad real es la que todas empezamos a conocer cuando somos madres, y no la que nos contaron”, comentó Eugenia el pasado junio del 2021.

Por otro lado, se expresó acerca de los detalles que desconocía respecto de ser madre. “El cuento está buenísimo y es hermoso pero contar todo también alerta, avisa y previene sobre algunas cosas que nadie te había dicho. Y está bueno saberlo. La voy llevando muy bien, creo que soy una madre bastante relajada, y me había imaginado más apegada e histérica pero la verdad es que no”.

Por último, Eugenia explicó que recibe la ayuda de su pareja y que se lo toma con la mayor tranquilidad posible. “Quizá la edad me lleva a tener otro aplomo. Y también tiene que ver mucho mi compañero, claro. Todo está bien, aunque a veces tengo mis ataques como cualquier madre. Una madre sin dormir es una madre peligrosa, mejor es tenernos felices”.

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