Ghostwriter: la ficción juvenil ganadora del Emmy que es la gran sorpresa de Apple TV+
Ghostwriter, una de las apuestas juveniles de Apple TV+, pudo haber quedado perdida entre la promoción de las producciones originales de la plataforma de contenido adulto y con mayor ruido -desde la popular The Morning Show hasta el thriller con el sello de M. Night Shyamalan, Servant- y, sin embargo, halló su lugar a fuerza de carisma e inteligencia. De hecho, podríamos emparentarla con Home Before Dark, otro efectivo contenido del servicio de streamingcuyo relato está atravesado por la mirada de los niños.
Con una primera temporada muy sólida que la erigió como una gran sorpresa -alzó el Daytime Emmy al mejor contenido de visualización infantil, entre otros galardones-, la remake de la serie Sesame Workshop, emitida por PBS de 1992 a 1995, está de regreso hoy con su segunda temporada, y con Andrew Orenstein nuevamente al mando como showrunner. Ghostwriter, como su nombre lo indica, fusiona la literatura con ribetes fantásticos cuando un fantasma comienza a perseguir una librería de un vecindario apacible y a desprender de sus páginas personajes de ficción al plano real, premisa que nos remite indefectiblemente a ciertas subtramas de Escalofríos de R. L. Stine.
Sin embargo, Ghostwriter logra, gracias al guion y dirección de Luke Matheny (ganador del Oscar por el cortometraje God of Love), trazar los límites dentro de su narrativa sobrenatural, para que ninguna secuencia sea demasiado aterradora. Por el contrario, la serie es entretenida, con bienvenidos momentos de humor, muy buenos efectos visuales, y un abordaje encantador de la dinámica de un grupo de cuatro niños que se reúnen, como Hilde y sus amigos en la citada Home Before Dark, para resolver un caso: quién es el fantasma que está revolucionando el pueblo donde habitan. Asimismo Ghostwriter toma a su whodunit como una excusa para fomentar la lectura (especialmente la clásica, con David Copperfield de Charles Dickens sobrevolando), abriendo así la ventana de la pedagogía, con una trama para pequeños de 6 a 11 años. Todo eso, en episodios de poco menos de media hora.
En diálogo con LA NACION, Matheny y dos de los jóvenes protagonistas de la serie, Hannah Levinson y Justin Sanchez, hablaron sobre la importancia de ver la serie en familia en este contexto de pandemia, sobre el as bajo la manga de la segunda temporada, e hicieron hincapié en la conexión que se forjó en el elenco infantil en esos nueve meses de rodaje en Canadá.
-¿Cómo vivieron la excelente recepción que tuvo la primera temporada de la serie?
Hannah Levinson: -Fue genial para nosotros, estamos todos muy orgullosos del programa que creamos, por lo cual fue muy lindo que nos dijeran que la gente lo disfrutó en familia, que les gustó la magia de la historia, y todo lo positivo que la serie muestra.
Justin Sanchez: -Lo maravilloso del programa es que pudimos unirnos como actores tan rápidamente y filmar estos episodios, apuntar a los más jóvenes, pero también a los más grandes, hacerlos disfrutar y aprender, mientras viven junto a los personajes el misterio central de la serie. Es un lindo sentimiento.
Luke Matheny: -Este fue un programa muy complicado de hacer, con efectos visuales, con partes complejas de filmar, requirió un gran trabajo, y por eso costó hacerlo, estuvimos en Toronto nueve meses trabajando con esto. Por eso, cuando lo estás haciendo, te concentrás en dar lo mejor, en estar ahí para tus colaboradores cuando te necesitan y en que la experiencia sea la mejor para todos. Luego la serie sale al mundo y toma como una especie de segunda vida. Fue muy gratificante que la gente la haya mirado, los premios que recibió también y que me hayan escrito excompañeros de la secundaria para contarme que la disfrutan con sus hijos.Ahora que la gente está en su casa, es una experiencia agradable para compartir en familia.
-¿Vivís de un modo especial que la segunda parte se estrene en tiempos de pandemia?
Matheny: -Sí, es especial y es extraño al mismo tiempo. Si te gustó la primera temporada, no creo que te decepcione la segunda porque la identidad del fantasma está cada vez más cerca de ser revelada, los niños están en medio de eso, hay muchos nuevos personajes como Sherlock Holmes, que saldrá de las páginas, pero con una vuelta de tuerca que ya verán.
-Justin Sanchez, mencionabas la camaradería en el rodaje, ¿fue inmediata la conexión entre los cuatro? ¿Se unieron como grupo?
Sanchez: -Sí, conectamos de inmediato. En realidad, tuvimos un solo día de ensayo donde nos conocimos y me acuerdo que cuando nos pasaron buscar, estábamos todos muy callados en el viaje. Cuando llegamos al lugar, ya fue distinto. No parábamos de hablar, son todos grandes compañeros.
Levinson: -Coincido con Justin. Trabajamos nueve meses juntos todos los días por lo cual era inevitable que se forjaran amistades, sobre todo cuando estábamos llevando esto adelante muy unidos. El lazo que creamos fue muy importante, somos muy cercanos ahora y creo que vamos a seguir en contacto por un largo tiempo en nuestras vidas.
-Luke Matheny, ¿cuáles son los desafíos que presenta el escribir con el lenguaje de un niño?
Matheny: -Es una pregunta interesante porque si bien estos programas son escritos por adultos que alguna vez fueron niños, los tiempos han cambiado muchísimo y quizá escribís algo que queda viejo para la actualidad y la mentalidad de los chicos de hoy. Lo que pasó fue que cuando llegaba al set y los escuchaba a todos leer el guion, ahí me iba dando cuenta de qué era lo que sonaba realista y qué no. Ellos son tan geniales, que suelen comentar para que ajustemos ciertas cosas porque la meta es que la audiencia crea todo lo que sucede, y que todo lo que salga de la boca de los chicos suene natural.
Levinson: -Sí, además sobre el final de la filmación yo noté que había cosas nuestras ya en los personajes, momentos en los diálogos, palabras o frases que decíamos fuera del rodaje y que terminaron en el guion. Eso se debe a que nos conocieron mucho en esos meses.
Sanchez: -Coincido. El ver cómo crecimos de un año a otro es increíble. Pudimos hacer un programa en el que también la idea es que los niños aprendan de literatura, expandan sus conocimientos. Eso es muy importante para nosotros.
Cuándo y dónde verla. La segunda temporada de