Martín Fierro 2017: los saludos más incómodos dentro de la fiesta

Pasó una nueva edición de los premios Martín Fierro y esta vez, a diferencia de otras, faltaron las polémicas. Salvo un par de discursos con algo de picante, el resto de la velada fue tranquila y sin sobresaltos. Al menos en lo que se vio en la transmisión de Eltrece. En los cortes, hubo cruces de mesas, gente que se saludó, gente que evitó hacerlo. A continuación, los detalles:

Araceli González llegó cuando la ceremonia transitaba la recta final, cerca de las 23:30 hs. Es que la actriz protagoniza, junto a Facundo Arana, Los Puentes de Madison, y lo primero es el trabajo. Una vez en el salón, saludó a todos sus compañeros de Los ricos no piden permiso, tira por la que estaban nominados. Luego levantó la cabeza y lo vio a Adrián Suar, su ex. ¿Se saludan o no?

Se sabe que ambos tienen una cordial relación, producto de un hijo en común, "Toto", y por este motivo se suelen ver. Sin embargo, hace unos meses Griselda Siciliani , flamante ex de Adrián, tuvo declaraciones que tocaron de cerca a Fabián Mazzei , la pareja de Ara, respecto al por qué el actor no trabaja en Pol-ka. A la ex modelo no le gustó nada y salió a responderle con los tapones de punta. No obstante, el momento se resolvió de manera agradable: Araceli finalmente se acercó y saludó a Suar.

La perlita es que a pocos metros estaba Siciliani, quien volvía de hacer fotos para una revista. "¿Se cruzarán?", decían los testigos por lo bajo. Griselda frenó su marcha y se quedó hablando, y haciendo tiempo, con Pablo Codevilla. Araceli advirtió la situación y, sutilmente, dio media vuelta y se volvió a su mesa. Recién ahí, la protagonista de Sugar se acercó al sector del Gerente de Programación de Eltrece.

Finalmente, González contó que hubo saludo con Siciliani, aunque se ocupó de dejar bien en claro que había sido ella quien tomó la iniciativa porque es "una señora muy educada".

En otra de las mesas principales, a pocos metros de la de los "popes" del canal de Constitución, estaba Marcelo Tinelli junto a su pareja, Guillermina Valdes . "El medio es muy chico", suele decirse, y en fiestas como esta es inevitable que se amontonen. Y, por ende, que se crucen. En un corte Guillermina, tratando de pasar desapercibida, se levantó y enfiló hacia la mesa de la productora Underground, propiedad de su ex, Sebastián Ortega . El hijo de Palito se llevó el Oro por El Marginal, pero antes un inesperado y cordial saludo de Guillermina. Luego, ella volvió a sentarse con Marcelo y por lo bajo le comentó lo que había hecho. El conductor de ShowMatch esbozó una leve sonrisa y se le alcanzó a leer en los labios: "Ah, mirá". A pesar de las internas del pasado, se sabe que una de las características del "Cabezón" es que siempre fue políticamente correcto.