Connie Culp, la primera receptora de un trasplante facial murió a los 57 años, según confirmó el sábado la Clínica Cleveland del estado de Ohio, Estados Unidos, donde se sometió a la delicada operación hace casi 12 años.
El centro de salud informó la muerte de mujer con un sentido mensaje a través de redes sociales. "Nos entristece la pérdida de Connie Culp, la primera receptora de trasplante de cara en los Estados Unidos. Ella fue una gran inspiración para todos nosotros en la Clínica Cleveland. Su decisión de someterse a un procedimiento a veces tan desalentador es un regalo perdurable para toda la humanidad", escribió el doctor Frank Papay, director del Instituto de Dermatología y Cirugía plástica del hospital.
We are saddened by the loss of Connie Culp, the first face transplant recipient in the U.S. She was an inspiration to all of us at Cleveland Clinic. pic.twitter.com/gvuJCzf7Jd&— ClevelandClinicNews (@CleClinicNews) July 31, 2020
Culp fue herida de gravedad en 2004 cuando su esposo, Thomas, le disparó con una escopeta para luego dispararse a sí mismo. El impacto le destrozó la nariz, las mejillas, el paladar y el ojo derecho. Cientos de fragmentos de perdigones de escopeta y astillas de huesos estaban incrustados en su cara. Solo le quedaban los párpados superiores, la frente, el labio inferior y la barbilla.
Las heridas de su pareja fueron mucho menores, fue declarado culpable de intento de asesinato y lo sentenciaron a siete años de prisión.
Culp soportó 30 operaciones en su rostro, incluidas cirugías donde los médicos tomaron partes de sus costillas para hacer pómulos y moldearon la mandíbula superior de uno de los huesos de sus piernas. Finalmente, durante un procedimiento de 22 horas en diciembre de 2008, los médicos reemplazaron el 80% de la cara de Culp con huesos, músculos, nervios, piel y vasos sanguíneos de otra mujer que acababa de morir.
La operación de trasplante de rostro fue realizada en el mundo apenas unas pocas docenas de veces y significa una lucha de por vida para evitar que el cuerpo rechace el tejido implantado. Además, los medicamentos destinados a evitar ese rechazo pueden propiciar una serie de infecciones que pueden derivar, incluso, en un cáncer.
Culp, madre de dos hijos, se dedicó tras la operación a dar charlas sobre la violencia doméstica y a alentar a otras personas que se sometieron a trasplantes de cara, incluida Charla Nash, una ciudadana de Connecticut que fue mutilada por un chimpancé mascota.
De forma sorpresiva, Culp perdonó a su esposo por dispararle. "Siempre lo amaré. Pero ya no puedo estar con él", dijo.
La causa y el día de la muerte de Culp no fueron revelados.