India: ¿Por qué es importante para el mundo el triunfo de Modi?

Narendra Modi arrasó en las elecciones de la India. El primer ministro no solo superó lo que vaticinaban las encuestas, que le otorgaban una victoria moderada, sino que ganó más proporción de votos que en 2014, según muestran los resultados parciales publicados hoy.

Con el escrutinio aún en marcha, el Partido Bharatiya Janata (BJP) de Modi obtenía 302 de las 543 bancas de la cámara baja del Parlamento y aplastaba así a su rival del Partido del Congreso, Rahul Gandhi, de la dinastía Gandhi-Nehru. En 2014 cuando obtuvo 282 escaños se habló de una victoria histórica.

En la India, Modi enfrenta varios desafíos como el desempleo y la crisis agrícola, pero más allá del plano interno, ¿por qué es tan importante su victoria para el resto del mundo? A continuación un resumen de los puntos clave:

Un motor para la economía mundial

La forma en que Modi gobierne durante los próximos cinco años tendrá repercusiones en todo el mundo, a medida en que la India juegue un papel más importante en la economía mundial y en la delicada geopolítica de Asia.

La India es el país que más crece entre las mayores economías del mundo, de acuerdo con el FMI. Mientras Modi esté en el cargo es probable que el país supere a Gran Bretaña y se convierta en la quinta economía más grande del mundo.

Este es un dato no menor ya que a medida que China se desacelera, la India puede ser un motor cada vez más importante para el crecimiento mundial.Si Modi puede en su próximo mandato mejorar la gestión económica –cosa que no logró en el primero- y romper algunas barreras burocráticas para el crecimiento, como las restricciones en la compra de tierras, podría ayudar a la India a acelerar su expansión. Por ahora el país crece a un ritmo de 7% por año, pero analistas estiman que ese número podría estar cerca del 10%.

Por otro lado, Modi decidirá qué papel puede jugar India en la geopolítica de la región. Según dijo a LA NACIÓN Lía Rodríguez de la Vega, experta en temas de la India de la Universidad de Palermo, uno de los desafíos de Modi es y será "la creciente asertividad y alcance de china a través de iniciativas como la de la Ruta de la Seda –un ambicioso proyecto de infraestructura global-", que tiene cada vez más peso en los países del Sur y Este de Asia. India, además, podría ayudar a contrarrestar a China o incluso atenuar las consecuencias de las tensiones entre Washington y Pekín por la guerra comercial.

El triunfo del populismo

La figura de Modi está fuertemente polarizada en la India. Durante la campaña, y los últimos cinco años, muchos vieron a Modi como "divisor en jefe" (como lo describió un artículo en la revista Time) y otros, como un intachable hijo de un vendedor de té y campeón de las masas.

Sus detractores observar en sus acciones y discurso hinduista una peligrosa deriva hipernacionalista y les preocupa que el populismo, que avanza en distintos países del mundo, se arraigue aún más en la India.

Al igual que otros populistas, Modi se vendió durante mucho tiempo como un antídoto contra la élite de la India. Su estrategia fue evitar a los medios de comunicación más importantes y prefirió comunicarse directamente a través de las redes. Su veta nacionalista, a menudo más explícita en otros funcionarios de su partido, ha excluido a las minorías del país. Periodistas, universidades y académicos dicen que el espacio para la crítica también se redujo

En el mundo estamos en "la era del gran hombre político, y nadie discute Modi es la fuerza más grande que India ha producido en décadas", sostiene un artículo de The New York Times, publicado el 20 de mayo pasado.

"Modi agita grandes multitudes. Establece objetivos sumamente ambiciosos, como construir 100 millones de inodoros en cinco años, que esencialmente logró (aunque no cumplió su promesa de crear millones de nuevos empleos). Proyecta una imagen sólida de la India en el extranjero, lo que la coloca en posición de desempeñar un papel más importante en el escenario mundial, ya que Estados Unidos y China compiten por la influencia en la región. Es decisivo y actúa más como un presidente que como un primer ministro", sostiene el diario.

Preocupación por las minorías

Para muchos esta elección fue como una batalla por la identidad de la India y la protección de las minorías. Desde hace cinco años, cuando Modi asumió, el nacionalismo hindú – estridente y a veces violento- se convirtió en una corriente fuerte en el país.

Casi 200 millones de musulmanes viven en la India y los casos de violencia contra ellos aumentaron, incluidos los linchamientos. Modi denunció esta violencia, pero los críticos señalan que tardó dos años en hacerlo.

Un informe de febrero de 2019 de Human Rights Watch detalló que entre mayo de 2015 y diciembre de 2018, al menos 44 personas, 36 de ellas musulmanes, fueron asesinadas en 12 estados indios. Alrededor de 280 personas resultaron heridas en más de 100 incidentes en 20 estados durante el mismo período.

Hoy, cuando reconoció su victoria, Modi prometió unir al país. Pero cumplir con su promesa de unidad será difícil, ya que la campaña del BJP fue a menudo divisiva y los musulmanes temen ser tratados como ciudadanos de segunda clase.

La India cumple 73 años desde la independencia como una nación secular y diversa. Para muchos analistas, con la victoria de Modi el país se encuentra, sin duda, en una encrucijada.