El proyecto “Casa Intermedia” del estudio paraguayo Equipo de Arquitectura, se mueve entre lo abierto y lo cerrado y combina técnicas de construcción artesanales e industriales.
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“Con las construcciones vernáculas entendimos que el espacio predilecto en una vivienda es el intermedio, escenario para recibir y compartir”, dicen los autores de esta casa en Asunción del Paraguay. De dicha reflexión viene su nombre, “Casa Intermedia”, obra del estudio Equipo de Arquitectura, fundado por Viviana Pozzoli y Horacio Cherniavsky.

La puerta de entrada da a un gran comedor, similar a los quinchos argentinos, con la diferencia de que los nuestros se ubican siempre en el contrafrente.

La casa está implantada en un lote angosto y profundo y queda dividida en dos por un jardín que ocupa la franja del medio, con un árbol de mango como protagonista. Los bloques se separan físicamente, pero se conectan visualmente. La primera parte, que vemos en estas imágenes, contiene un espacio para garage, la entrada y un gran comedor que se asemeja a los quinchos argentinos.

Buscamos integrar el entorno con el artificio, lo construido. Con respeto, transformamos ese medio natural potenciando las preexistencias que lo caracterizan.”
— Arq. Viviana Pozzoli y Horacio Cherniavsky

Cruzando el patio
La segunda parte de la casa contiene un living con cocina integrada y el dormitorio, con cerramientos rebatibles que permiten resguardar el living del patio, esconder la cocina o disimular el cuarto, según la necesidad social.

“Toda la cubierta de la vivienda descansa sobre los muebles que configuran el perímetro del terreno. Esa doble función es aplicable al espacio, en donde lo social y lo privado se van entremezclando según el uso. La flexibilidad funcional de la vivienda se ajusta a la condición permutable de los modos de habitar, donde el usuario de la casa se convierte en el arquitecto de esas transformaciones”, explican.

Las bóvedas armadas son una presencia ineludible. Fueron construidas en forma artesanal, cortando por la mitad bloques de tierra compactada, también conocido como BTC, y utilizando los canales resultantes del corte como encofrado para una fina capa de hormigón.


La “Casa Intermedia” no escatima en espacio, pero evoca ese espíritu; el de reivindicar lo que requiere un hogar no para reflejar estatus o excesos, sino para esgrimirse como contenedor de una vida rica.

“Un espacio construido de 115m2, que se transforma mediante filtros, puertas y persianas, responde al existenzminimum bajo una perspectiva local, subtropical”, dicen los autores de la obra. Existenzminimum es una palabra de origen alemán que describe un concepto surgido en la posguerra de la Segunda Guerra Mundial. Ante la crisis habitacional y la baja disponibilidad de recursos, se propone construir unidades adecuadas y completas reducidas a su conformación esencial.

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