En Banderaló, nadie puede terminar de entender la tragedia
A ese pueblo bonaerense pertenecían los cinco menores que perdieron la vida en la ruta 7
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GENERAL VILLEGAS.- No hacían falta palabras en el cementerio de Banderaló, muy cerca de esta ciudad. El silencio era tajante. Las lágrimas de dolor afloraban de los ojos de los vecinos conmocionados. Todo un pueblo estaba allí. Despedían a esos cinco niños y tres adultos que fallecieron anteanoche, luego de que chocaron un camión con acoplado y una combi.
Mientras el duelo ganaba las calles de Banderaló, el fiscal general del Departamento Judicial de Junín, Juan Manuel Mastrorilli, confirmaba que el chofer del camión, Antonio Sánchez, de 60 años, quedó imputado del delito de homicidio culposo agravado por el número de víctimas (en total son ocho: el conductor, Alejandro González, de 31 años; Mariel Calcina y Ana María Galetto, madres de dos niños, y los menores Pedro Mendíaz, Tiago Godoy, Elías Cuenca, Juan Díaz y Tomás Merlano).
Muy temprano, los cuerpos de las víctimas llegaron a la localidad de Banderaló. Los acongojados familiares no estaban solos. Los esperaban un gran número de vecinos. Todos se conocen en este pueblo de 1300 lugareños y todos estaban conmocionados por la tragedia.
Mientras los restos de las víctimas eran velados en el legendario club Juventud Unida, donde los chicos pasaban largas horas jugando al fútbol, la pasión local, Banderaló permanecía en silencio. "Estamos de luto", susurraban los pocos vecinos que, con voz entrecortada, se animaban a hablar.
El tan ansiado viaje para visitar la cancha de Racing, en Avellaneda, se había programado con mucha anterioridad. En la mañana del día del mortal accidente, los chicos habían salido de sus hogares durante la madrugada con un entusiasmo poco visto antes. Iban a conocer el estadio de uno de los clubes argentinos más importantes y compartir momentos inolvidables con sus padres. Para casi todos se trataba de su primera vez fuera de su ciudad natal.
La experiencia había sido maravillosa, contó a LA NACION Fabián Eceiza, papá de uno los pequeños futbolistas que viajaron. Los jóvenes disputaron un partido y hasta tuvieron la oportunidad de conocer al técnico Diego Simeone y al plantel completo de la primera división de Racing, con quienes incluso se tomaron fotografías.
El viaje fue compartido con amigos de las localidades vecinas de Ameghino y Granada, con quienes las víctimas solían enfrentarse en las canchas. Pero quiso el destino que los cinco chicos que murieron cursaran en la Escuela N° 6 de Banderaló, la única que funciona en el pueblo.
Ayer, el personal de la institución lloraba por los niños y por la vicedirectora del establecimiento, que también falleció en el accidente. La directora, Analía Castignani, visiblemente impactada por la noticia, dijo: "Esto nos descoloca muchísimo. Estamos pensando en cómo vamos a volver a las aulas el día después".
Eceiza, presidente del club Sarmiento de Ameghino, no sólo acompañó a su hijo de 8 años en esta travesía. Fue uno de los padres que, a fuerza de coraje, superaron el dantesco paisaje del lugar de la tragedia y ayudaron a sacar a los niños de la combi aplastada.
Entre lágrimas, recordó a esta enviada lo difícil que fue ingresar en el rodado -lo hizo por una ventanilla- y encontrar a pequeños, que hasta hace algunas horas atrás había visto riéndose, hundidos contra los asientos. Algunos estaban con vida; otros, ya no. "Pero todos tenían su cinturón puesto", destacó el hombre, consternado al revivir el momento que sabe que nunca más olvidará.
El dolor no terminó allí para esta comunidad que registra las peores horas de su existencia. Uno de los niños que sufrieron graves heridas está en estado desesperante en el Hospital Interzonal de Junín, según indicaron voceros de la cartera de Salud provincial, y una mujer -madre de uno de los chicos fallecidos- también está alojada en el mismo centro asistencial, aunque fuera de peligro. Para esta señora todavía falta lo más grave: enterarse de que su hijo ha fallecido.
En tanto, otras 11 personas resultaron heridas, entre ellas el chofer del camión, imputado del accidente, que está estable y con la fractura de un brazo, internado junto a dos mayores y dos menores en el Hospital Municipal de Chacabuco.
Con respecto a la investigación judicial, los voceros comentaron que la documentación de la combi "estaría en regla", aunque todavía resta conocer el resultado de los peritajes efectuados en el vehículo para establecer fehacientemente los motivos que provocaron la tragedia.
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