Un auto picante, deportivo y de altas prestaciones, con excelente mecánica y gran equipamiento, oculto detrás de la estética sosegada de un sedán familiar
Quién dijo que los sedanes son aburridos? Si bien los autos tricuerpo suelen asociarse a un estilo señorial y tranquilo, para un usuario que busca un automóvil más confortable que picante, lo cierto es que toda regla puede tener su excepción.
Esta es el Volkswagen Vento GLI, la versión deportiva de la familia del mediano que la empresa alemana fabrica en México (allí se llama Jetta, como en otros mercados), que lejos de ajustarse al estereotipo creado sobre los sedanes, tiene la misma garra y prestaciones que el más pintado de los hot hatch (su primo Golf GTI, sin ir más lejos).
Si bien estéticamente no se diferencia demasiado del resto de las versiones de la gama, el GLI se distingue básicamente por una fina línea roja que atraviesa la parrilla y los correspondientes apliques GLI en algunos puntos de la carrocería.
Pero debajo del capot está la diferencia real: el GLI tiene un motor de 4 cilindros en línea de 2.0 L que, con turbocompresor e inyección directa de combustible (de hecho, el mismo del mencionado Golf GTI), que entrega una potencia de 230 CV a 4700 rpm y un torque de 35,7 kgm entre 1500 y 4000 vueltas, gracias a la acción temprana (a muy bajo régimen) del turbo. Además, está asociado a la que es quizás la mejor caja automática que existe: la del tipo de doble embrague; concretamente en este caso, la DSG (de 6 marchas) de Volkswagen, que es pionera en este sistema. Así, entre la rapidez y precisión de la transmisión y el máximo par apenas empieza a "soplar" el turbo (1500 vueltas), la performance de este Vento GLI es brillante: 0-100 km/h en 7 s, 0-400 m en 15,2 s, 0-1000 m en 26,7 s y recupera en D (modo estándar Drive) de 80 a 120 km/h en 3,9 s.
En cuanto al consumo, si bien en el ciclo urbano es bastante alto (12,3 L/100 km) más allá que cuenta con un eficiente sistema Start&Stop en las detenciones, en la ruta en cambio va muy descansado, por lo que a 120/130 km/h (autovías y autopistas) el consumo baja drásticamente a unos 7,6 L/100 km, lo que proporciona además una autonomía de más de 650 km.
Dinámica con garantías
El comportamiento dinámico es impecable, producto de la combinación de la suspensión delantera del tipo McPherson y la trasera Multilink (multibrazos), que también es de lo mejor que puede encontrarse en un auto de serie. Gracias a estos esquemas (con amortiguación más bien rígida) el Vento GLI resulta aplomado y estable en rectas y todo tipo de curvas, donde también lo ayudan los neumáticos de bajo perfil (225/45) montados sobre llantas de 18 pulgadas (de bonito y deportivo diseño, además). El confort de marcha, pese a que pueda suponerse incómodo por la dureza de las suspensiones, es muy bueno: los amortiguadores absorben bien, por ejemplo, los empedrados de la ciudad. Nota destacada para los frenos, potentes y de rápida respuesta, que lo paran de 100 km/h a 0 en solo 36 m (mejor incluso que muchos autos premium).
El interior es sobrio y clásico de casi todos los modelos de Volkswagen, que utilizan un diseño similar y buena parte de los mismos comandos y elementos que, para fortuna del conductor, están ubicados en lugares intuitivos y al alcance. La posición de manejo es fácil de regular por los múltiples ajustes eléctricos de la butaca y de la altura y profundidad del volante. El instrumental es totalmente digital y configurable (podemos tener o no la simulación de los elementos analógicos), además de contar con una amplia gama de información (consumo, autonomía, radio, mapas, etcétera). Buena parte de esta información y otras también se pueden manejar desde la pantalla táctil en la parte superior de la consola, que además muestra las imágenes de la cámara posterior y del asistente de estacionamiento, con dibujos de lo que perciben los sensores delanteros y traseros. Además, la excelente dirección eléctrica favorece la maniobrabilidad.
La habitabilidad delantera es óptima, atrás el espacio es más justo aunque suficiente para que dos adultos viajen cómodos; esto deja lugar para un enorme baúl de 510 litros de capacidad.
El equipamiento es muy completo. En el rubro seguridad cuenta con airbags frontales, laterales y de cortina, controles de estabilidad y tracción, ayuda de arranque en pendiente y anclajes Isofix. No cuenta con sistemas más sofisticados como los de cambio de carril y otros de ese tipo.
En cuanto al confort incluye climatizador bizona, arranque y apertura sin llave, un excelente sistema de infotainment, techo solar, control de velocidad de crucero, levas de cambios en el volante y mucho más. En suma, un deportivo de raza oculto bajo la silueta de un auto señorial. El precio es de $2.315.700.