La inclusión social, un eje para la banca pública
Los bancos tienen una gran responsabilidad en la promoción de un auténtico desarrollo integral inclusivo. El Banco Nación (BNA), como banco público, tiene la misión de servir financieramente a aquellas personas y empresas que no son adecuadamente atendidas por la banca privada. Esto ocurre por diversas razones: porque son muy pequeñas, o no tienen garantías suficientes, o requieren plazos más largos de los habituales, o porque están en lugares remotos, o tienen una organización jurídica de difícil ejecución crediticia.
Esta convicción explica el protagonismo del BNA en los últimos años en diversas áreas. En préstamos hipotecarios a 30 años, el banco tiene el 53% del mercado. Fue el principal sostén del programa Procrear y hoy estamos financiando desarrollos "desde el pozo" para incrementar la oferta de viviendas para las clases media y media baja.
A los pequeños emprendedores les hemos otorgado más de 30.000 créditos desde marzo de 2018, con un promedio de casi $250.000 cada uno, para las más variadas actividades. Seguimos recuperando terreno en los créditos a las pymes , especialmente del sector agropecuario, que fueron abandonadas hace 10 años. Esto explica el crecimiento del 190% en nuestra cartera total de préstamos en los dos últimos años y un aumento del 50% en la participación del sistema financiero.
Este crecimiento lo concretamos en un contexto crediticio difícil y sin ventajas como agentes financieros del Estado, excepto la garantía implícita por nuestro carácter de entidad pública. También lo hacemos preocupados en profundizar nuestro carácter federal y el cuidado del ambiente, de modo que, de la mano de la inclusión social, aspiramos a ser identificados como "banca ética". En la actualidad, el 80% del crédito se otorga a través de nuestras sucursales, tratando de revertir el proceso de concentración crediticia que se generó en el país a partir de la reforma financiera de 1977, agravada por el proceso de privatización de la banca provincial en los años 90.
Durante 2018, durante la presidencia argentina del G-20, el Banco Nación tuvo un rol activo en la agenda multilateral dirigida a fortalecer a la banca pública como motor de inclusión financiera para la inclusión social. En su sede se organizaron dos seminarios sobre estos temas. Fue relevante la convocatoria conjunta con el PNUD de las Naciones Unidas y el Intal del BID, así como la participación de otras organizaciones como European Partners for the Environment, Global Alliance for Banking on Values, Dicasterio para el Desarrollo Humano del Vaticano, Climate Bonds Initiative y World Savings Bank Institute (WSBI), entre otras. También participaron organizaciones involucradas en las diversas emergencias sociales, como la AMIA, Nuestras Huellas, Cascos Verdes, Habitat Humanitas, Fundapaz, Cáritas y Red Panamazónica.
Las conclusiones y compromisos fueron muchos y concretos y de inmediata aplicación en países como la Argentina, como la importancia de protección social y promoción del empleo e impulsar las actividades en sectores con sostenibilidad ambiental. También la necesidad de fortalecer las plataformas que trabajan por el desarrollo humano integral para que unan sus fuerzas hacia modelos basados en inversiones éticas y sostenibles que impulsen una economía resiliente, baja en carbono, con creación de trabajo digno; empoderar a los diversos actores de la sociedad civil y a los así llamados millennials. A nivel mundial, se calcula que los millennials representan mil millones de personas, con una creciente potencialidad como inversores y como actores políticos, orientando sus recursos a inversiones con beneficios verificables en lo social y lo ambiental.
Como consecuencia del renovado compromiso hacia una banca más cercana a la gente, el BNA fue elegido para integrar el Board del WSBI en su asamblea general de noviembre pasado en Nueva Delhi.
Es muy importante difundir la existencia de otra banca basada en valores humanos, alejada de la codicia y la especulación y no atada obsesivamente a una rentabilidad inmediata. Muchas personas y organizaciones en el mundo trabajan por una transición justa y sustentable hacia un mundo mejor; lamentablemente son poco conocidas. La banca en general, pero la banca pública en primer lugar, debe incidir urgentemente en políticas que prioricen la calidad de vida de todas las personas. Hoy y en el futuro.
Presidente del Banco de la Nación