Alfredo Casero: un actor en estado de agitación permanente

Desde su famosa frase de "quieren flan" hasta su enfrentamiento con el ambiente artístico identificado con el kirchnerismo, Casero pasó por todo. Desde resistir el escarnio en las redes sociales (muy activo en Twitter con su cuenta @agencialavieja), la suspensión de sus shows en el interior (Salta y Tucumán) hasta recibir actos intimidatorios en las puertas de las salas donde se presenta. El humorista y actor nunca fue una personalidad dócil ni encuadrada en lo que suele denominarse como políticamente correcto. Al contrario, uno de sus valores ha sido una trayectoria contrafáctica que incluye una amplísima gama creativa: sus comienzos en el teatro subterráneo en el Parakultural, el éxito inoxidable del ciclo Cha Cha Cha a principios de los 90 y sus interpretaciones actorales en el cine y la televisión que le valieron el reconocimiento y premios. También explotó su faceta musical a principios de 2000 y logró un éxito absolutamente "a lo Casero" con su disco Casaerius, que traía la canción "Shima Uta", un tema de 1992 de la banda japonesa The Boom, cantado en japonés, y que se convirtió en un hit tremendo, incluso en Japón. O sea: Casero puede resultar controvertido (nada nuevo), pero nunca dejó de lado su faceta creativa. Ahora, con ganas de seguir agitando las aguas presenta ¿De qué no se puede hablar?, con esa idea fija de evitar la censura pertinaz sobre el pensamiento y las palabras.

LA NACION

• Alfredo Casero

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