Tras luchar contra el cáncer, Shannen Doherty regresa con un film clave en la era del #MeToo
Shannen Doherty atravesó unos años muy difíciles. En 2015 fue diagnosticada con cáncer de mama, lo que la llevó a realizar quimioterapia durante casi un año para combatirlo. Asimismo, la exprotagonista de Charmedse sometió a una reconstrucción mamaria y compartió su lucha contra la enfermedad en sus redes sociales. "No puedo imaginarme lo que debe ser vencer al cáncer y que vuelva a tu cuerpo otra vez. Por ahora me mantengo positiva, y hago lo que puedo para contribuir a los investigadores, para que el cáncer pueda ser vencido de una vez por todas", expresaba en mayo de este año.
Finalmente, la actriz se sintió lo suficientemente fuerte como para retomar su profesión, y el domingo estrenará en la pantalla de Lifetime la remake del largometraje de 1996 No One Would Tell, donde Doherty interpreta a la madre de una joven que desaparece tras meses de abuso a manos de su novio, una historia clave en la era del #MeToo de la que Shannen quiso formar parte. "Es una película muy relevante respecto a lo que está pasando hoy en día. El abuso, sea físico, sexual, emocional o verbal, está siendo expuesto", manifestó la actriz en una entrevista con la revista People, donde también habló de cómo se sintió al regresar a un set de filmación.
"No quiero que el cáncer sea lo único en lo que pueda focalizar, antes que nada soy una actriz y amo mi arte", explicó, no sin antes exponer el lado positivo de haber atravesado años tan duros. "El cáncer me ayudó a abrir los ojos a lo que realmente importa en la vida. Te das cuenta que son las pequeñas cosas las que hacen que un día o un año puedan ser increíbles. Todo eso lo podés usar en la actuación, porque ya no les tenés miedo a los errores o a las críticas, hay una gran libertad en eso", concluyó.
En agosto de 2017, Doherty había hecho una participación en la serie Heathers, remake del film de culto de 1988 que lamentablemente no encontró pantalla. "He regresado al rodaje hoy. Han sido dos años muy duros. Luchando contra el cáncer. Como actriz, la gente te sienta en el banquillo. Piensan que eres demasiado débil, incapaz. Y es algo como el trabajo lo que te da fuerzas renovadas para vencer a la inimaginable bestia. Hoy me he comparado con un auto. Ese Shelby Vintage que ha estado demasiado tiempo en el garaje. Sigue siendo un auto genial. El mejor. Solo necesita tiempo para que el motor se caliente y ya está listo. Actuando como debería. Estoy agradecida por el día de hoy", escribió por entonces la actriz.
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