Día Mundial de la Inocuidad Alimentaria: envases que garantizan el bienestar
La conservación de los alimentos no es un tema menor y siempre es bueno recordar la importancia de un envasado seguro y amigable con el medioambiente.
El envasado seguro de alimentos -verduras, carnes, mariscos, productos avícolas y lácteos- se remonta al año 1810, aproximadamente, cuando ya se los sometían a altas temperaturas y/o al agregado de ácidos para destruir cualquier microorganismo o agente patógeno (como el clostridium botulinum, causante del botulismo) capaz de poner en riesgo la salud de los seres humanos.
La mecanización de los procesos de envasado corrió a la par del crecimiento de las poblaciones urbanas. Una demanda cada vez mayor, así como la concientización sobre la caducidad de los diferentes productos y los riesgos que esto conlleva.
Con el fin de “llamar la atención e inspirar acciones que ayuden a prevenir, detectar y gestionar los riesgos transmitidos por los alimentos, contribuyendo a la seguridad alimentaria y la salud humana”, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) establecieron -en el año 2019- el 7 de junio como el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos.
Una excusa perfecta para seguir sensibilizando a la población mundial sobre la importancia de la conservación e instar a los gobiernos, productores y consumidores a comprometerse día a día para garantizar alimentos seguros e inocuos desde la granja a la mesa. Por eso, el recipiente que los contiene también cumple un rol fundamental, y se nos hace casi imposible dejar afuera las ventajas de los envases de Tetra Pak.
Seguros, cómodos y reciclables
Fascinado por los contenedores de comida norteamericana y como se modificaban la distribución de alimentos, a finales de la década del cincuenta Ruben Rausing -doctor de origen sueco y fundador de Tetra Pak- tuvo la idea de crear un envase para almacenar leche producida con el mínimo de material, pero con el máximo de higiene. Su premisa fue “un envase debe ahorrar más de lo que cuesta”.
El embalaje de cartón en forma de tetraedro que conocemos hoy en día se introdujo al mercado en el año 1963, tras un largo proceso de desarrollo. El novedoso envase constituyó toda una revolución y un éxito de ventas inmediato que rápidamente trascendió las fronteras del país escandinavo.
¿Por qué? Es sencillo. Los alimentos en envases de cartón de Tetra Pak son seguros para el consumo, ya que las diversas capas que lo componen garantizan la preservación de los productos sin necesidad de conservantes o refrigeración, manteniendo sus propiedades originales (color, textura, sabor natural y valor nutricional). Ni hablar de su comodidad o el hecho de que son amigables para el medioambiente y totalmente reciclables.
Lácteos, jugos, conservas y vinos, entre otros productos, listos para consumir gracias a que los envases de Tetra Pak son completamente asépticos y aseguran su calidad. Además de permitir un simple y fácil almacenamiento.
Nociones a tener en cuenta en el mes de la #InocuidadAlimentaria, donde también es responsabilidad de los consumidores ser conscientes de la conservación de los productos, su seguridad y el buen uso de estos envases.
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