La UCR suspendió la marcha en apoyo de la intendenta de La Rioja a la espera de respuestas de la Casa Rosada

La UCR suspendió la marcha convocada para hoy en apoyo a la intendenta de la capital riojana, Inés Brizuela y Doria. Según dijeron fuentes partidarias a LA NACION, todavía no se definió cuándo se realizará la marcha. “Basta de depotismo y de provincias feudales” era la proclama con que se había llamado a reunirse en la puerta de la Cada de La Rioja en la Ciudad de Buenos Aires (CABA), en una clara continuidad de la nacionalización del conflicto entre Brizuela y Doria y el gobernador peronista Ricardo Quintela.

La intendenta y el gobernador estuvieron hoy en la ciudad de Buenos Aires. Brizuela y Doria buscó ser recibida por el presidente Alberto Fernández o el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, para plantearles los problemas que hay con la coparticipación provincial. Esa presentación ya la hizo ante la Corte Suprema de Justicia, ante la cual demandó a la Provincia.

Por su lado, Quintela también realizó trámites y mantuvo reuniones con funcionarios de la Casa Rosada. El gobernador mantiene una buena relación con el jefe de Gabinete, Juan Manzur, incluso desde antes de que llegara a ese cargo.

Para no entorpecer las líneas tendidas, es que la UCR decidió frenar la marcha. En la convocatoria se planteaba que Quintela “promueve la violencia, el caos y la desfinanciación” de la Municipalidad riojana por estar “gobernada por la oposición”.

“Se quedará haciendo trámites hasta que haya una respuesta -dijeron fuentes cercanas a Brizuela y Doria a este diario-. No podemos continuar así; la Provincia maneja la coparticipación de manera arbitraria. A todos los municipios les paga los sueldos de los estatales y, después, les manda lo que le parece para gastos de funcionamiento”.

La Rioja no tenía ley de coparticipación municipal; la sancionó su Legislatura en 2016 después de que la Corte Suprema, dos años antes, ordenara que esa norma debía existir. Fue en los años de Quintela intendente de la ciudad capital -ocupó ese cargo entre 2003 y 2015- que se recurrió al máximo órgano judicial de la Nación para que se pronunciara sobre la omisión de ese distrito de dictar esa ley de distribución de fondos con las municipalidades.

El fallo de la Corte estableció que “solo criterios discrecionales gobiernan la distribución de fondos a los municipios por parte de la provincia, y la municipalidad de la capital ha sido particularmente discriminada en el reparto”. La ley no existía a pesar de que su Constitución de 1998 lo ordenaba.

El conflicto esta vez se repitió porque Brizuela y Doria pasó a planta a 2500 contratados, cuyos salarios no alcanza a cubrir con los recursos que recibe de la Provincia. El gobernador la acusa de haber tomado la decisión por cuestiones electorales. Desde octubre en la ciudad hubo intentos de toma del Palacio Municipal, copamiento de las oficinas públicas, basura sin recoger, peleas en la calle y acusaciones de inacción policial.

El argumento de la intendencia es que la Provincia reparte solo el 9,5% de los fondos entre todos los municipios, haciéndose cargo del pago de salarios. Esgrimen que ese porcentaje fue del 17,6% pero se fue modificando.

“Aun así nos correspondería $629 millones mensuales y en noviembre nos mandaron $229 millones más 22 millones para un bono que dio la Provincia -continúa la fuente de la Municipalidad-. Si nos giraran lo que corresponde, alcanzarían para pagar los sueldos de toda la planta y quedarían $210 millones para funcionamiento”.

A su vez, la Provincia de La Rioja presentó una demanda ante la Corte Suprema contra la Nación reclamando un punto de coparticipación que, aunque perdió en 1998, recuperó vía un formato denominado extracoparticipable.

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