Monchi: el “Messi” de los directores deportivos en 13 episodios producidos por Sevilla
La cancelación de las ligas deportivas por la pandemia y la necesidad de no perder conexión con sus hinchas puso a muchos clubes en la senda de la creatividad y la generosidad. Un caso es el del Sevilla FC que desde el lunes 20 publica una serie de contenidos en YouTube enfocados en la principal figura de ese club en los últimos 20 años: su director deportivo. Ese personaje es Ramón Rodriguez Verdejo, conocido mundialmente como Monchi. Siendo que hablamos de fútbol y que las comparaciones explican por si solas la categoría de un personaje, no escapemos al recurso: Monchi está considerado como "el Messi de los directores deportivos". Es el arquitecto de un club que compró barato, vendió caro y en el camino conquistó títulos por encima de su media histórica.
"Monchi 13 –Masterclass" es una serie que abarca 13 capítulos de 13 minutos con directa referencia al número que utilizó como arquero de Sevilla. Hasta su retiro en 2000, Monchi estuvo más en el banco que en campo de juego. Tuvo más observación que acción. Sus estudios de derecho terminaron de moldear a un directivo que originalmente tenía más pasión por la política que por el fútbol. El modo de gestionar y tomar decisiones de Monchi representa en la actualidad el prototipo de lo que implica ser un director deportivo.
Esas cualidades se resumen en "El Método Monchi: las claves del sistema de trabajo del Rey Midas del fútbol mundial", un libro escrito por Daniel Pinilla en el que Monchi entra y sale con textuales sobre su método de trabajo. Los interesados pueden conseguirlo en formato e-book por solo 90 pesos. El lanzamiento del libro fue en abril de 2017, en un momento en el que el propio Monchi fue protagonista resonante del mercado de pases: la Roma le ofreció un contrato por cuatro años para ocupar el cargo de director deportivo. Finalmente, Monchi estuvo apenas dos temporadas y en marzo de 2019 volvió a Sevilla. Le guardaron su silla.
"Somos un club vendedor porque con nuestros ingresos habituales no podríamos llegar adonde llegamos. Pero también nuestra idea consiste en generar plusvalía para tener una plantilla por encima de tus posibilidades. Y asumir que eso, además, no te garantiza el éxito", dice Monchi en el libro cuando traza un perfil sobre Sevilla. Estar "por encima de sus posibilidades" tiene una referencia concreta: Sevilla ganó tres Europa League consecutivas entre 2014 y 2016.
La captación de talentos para potenciarlos y luego negociarlos es uno de los activos más valiosos del sistema de Monchi. Él mismo se jacta de haber "peinado" los mercados brasileños y argentinos como nadie. Dani Alves es su mejor gol: el préstamo y la cesión del jugador desde Bahia le costó al Sevilla 1 millón de euros y luego lo vendió a Barcelona por 36 millones. Las negociaciones posteriores por Adriano, Keita, Rakitic y Aleix Vidal representaron más de 100 millones de euros ingresados a Sevilla desde la tesorería del Barca. Monchi interceptó al hermano de Ivan Rakitic en un aeropuerto un 25 de diciembre para terminar de convencer al futbolista de su salida del Schalke 04. Nota mental: Monchi se sentaba como arquero suplente al lado de Carlos Bilardo cuando el técnico argentino dirigió al Sevilla en la temporada 1993/94.
El método Monchi sostiene que las ventas de futbolistas son un arte especial. Además de los casos de proyectos que todavía no "explotaron", están los jugadores que llevan tiempo en el club. Hay que tener en claro cuando un futbolista ha llegado al techo de sus prestaciones y tener un ojo clínico para advertir el proceso de desintegración de un vestuario. Ni siquiera hay que pensarlo dos veces cuando el futbolista manifiesta que se quiere ir: ese jugador ya no está comprometido con el club. "Las ventas son parte del juego del mercado de jugadores y hay que saber interpretarlas como una herramienta clave para crecer. Saber traspasar es síntoma de habilidad, de club con amplia dimensión", explica Monchi.
El asunto tiene sus secretos: resistir a la presión mediática, no escuchar lo que dice la "grada" y presentar todo el proceso de partida del futbolista como algo no deseado. Luego hay que seguir la observación a distancia: si el jugador no supera en otro club el rendimiento que tuvo en Sevilla, esa es la confirmación de que fue una buena venta.
Cuando Monchi se sentaba al lado de Bilardo como técnico del Sevilla
El sistema de trabajo organizado por Monchi en Sevilla no es una receta mágica. Nada garantiza que funcione en otro club si se la ejecuta del mismo modo. Monchi tampoco gana siempre: Real Madrid en 2006 compró a Marcelo con 18 años cuando estaba en Fluminense y estaba a punto de subir al avión para cerrar con Sevilla. El Madrid no lo conocía: solo lo compró porque se enteró que Monchi lo tenía en su radar. Lo mismo le pasó con Robin Van Persie en 2004, cuando el jugador arregló con Arsenal en medio de conversaciones con Sevilla. Esas "derrotas" le sirvieron a Monchi para comprender que su método estaba funcionando.
Monchi en 2020, a tres años de la salida del libro, es un director deportivo en constante evolución. "No tener en los clubes un departamento de I+D es algo que ha quedado obsoleto…", le dijo a una audiencia de analistas de datos y expertos en big data. Fue en la última semana de enero, en el Wanda Metropolitano de Madrid, en un forum sobre big data y nuevas tecnologías en el fútbol. Monchi es un ejecutivo que está al tanto de todas las innovaciones y recursos que puedan ayudarlo a mejorar su trabajo. Los usa todos.
"Estimamos que hay 18 mil jugadores en el mundo que son potables para formar parte de equipos competitivos. Sería imposible seguirlos semana a semana a todos, por lo que el uso de datos funcionar para ganar tiempo y centrar nuestras decisiones", dijo en ese foro. Quienes digan que los datos no son importantes para el scouting de futbolistas es porque no saben que un club en 2020 está en condiciones de seguir a 18 mil jugadores casi en tiempo real.
Sevilla libera en 13 capítulos de 13 minutos el conocimiento de su director deportivo. Una institución que hizo de un arquero suplente, al que no negoció con ningún club, la fuente de ingresos más grande de su historia.
Más leídas de Deportes
"Buscaba cosas malas". La figura de Brasil que provocaba a la selección argentina tocó fondo y encontró una solución
Indiscutible. Ángel Di María, el sexto nombre en el Olimpo histórico de la selección argentina
Del desprestigio al asombro. El caballo que viajó 10.000 km, saltaba charcos en una pista precaria y correrá por 7 millones de dólares