Oscar Ruggeri reveló cuál era el peor insulto que le podían decir en una cancha
A pesar de que el exjugador admitió en más de una ocasión que las descalificaciones lo inspiraban, había una de ellas que “le tocaba el orgullo”

Los jugadores de fútbol están acostumbrados a recibir insultos en todo tipo en las canchas. En nuestro país, al menos, ser destinatario de improperios forma tristemente parte del oficio y la rutina de cada fin de semana. Y en general, los receptores de los peores improperios son los jugadores emblemáticos, provocadores y audaces, como lo fue Oscar Ruggeri.
En más de una ocasión, el devenido panelista de televisión confesó que recibir insultos de las tribunas lo motivaba y lo hacía seguir adelante. El clásico “Ruggeri, hijo de p..., la p.. que te parió” era, en algún punto, música para sus oídos. Sin embargo, había algo que no le gustaba que le dijeran al emblemático jugador de la Selección argentina, según confesó este lunes en el programa “Equipo F” de ESPN.

Cuando Sebastián Domínguez, también exfutbolista, contó que su padre tenía el hábito de decirles “buuuurros” a los jugadores, el “Cabezón” consideró que “eso es lo peor que te pueden decir” como futbolista. “Te pone mal”, agregó con la expresión de quien se siente desacreditado.
A su vez, el exdefensor confesó que la palabra “burro” le “toca le orgullo”, y la definió como “la peor puteada que hay”. Incluso le dijo a Domínguez que le dé un recado a su padre con la siguiente frase: “‘¿Cómo les va a decir ‘burro’ a los jugadores?’”.
Otras noticias de Oscar Ruggeri
Más leídas de Deportes
"Perdón por haberte hecho eso". Un defensor brasileño se arrepintió de haber provocado a Di María con un tema sensible por consejo del Kun
Lo dejaron solo. El grito desesperado de un Scaloni que no tuvo eco en el vestuario ni en la AFA: ¿Está a tiempo de seguir?
Países Bajos, monarca. Así quedó la tabla de campeones históricos del Mundial Junior de hockey femenino
Los Pumas, campeones en Sudáfrica. Así quedó la tabla de posiciones del Circuito Mundial de Seven