Reclamó más vino en el avión, se lo negaron y todo terminó en un escándalo

El mal comportamiento de la pasajera de un vuelo con destino a Los Ángeles ocasionó un escándalo a bordo, que obligó al piloto a desviar la ruta hacia el aeropuerto más cercano y expulsar a la mujer de la nave, de modo que el resto de los pasajeros pudiera continuar su viaje con cierta normalidad.

El caos se desató cuando la mujer pidió que le sirvieran más vino. Tras recibir una negativa, se quedó en el pasillo sin hacer caso a las instrucciones del azafato que le gritaba con insistencia para que volviera a su asiento. Además, le advertía que si no se controlaba sería arrestada, según evidenciaron algunos videos publicados en la cuenta de TikTok @bperkins33.

La rabieta de la mujer al no conseguir más bebida elevó la tensión con la tripulación, a tal grado que el avión tuvo que cambiar de ruta para aterrizar en el aeropuerto de Phoenix, donde finalmente controlaron la situación. En un comunicado posterior, la aerolínea que operaba el vuelo entre Houston y Los Ángeles confirmó que la pasajera fue expulsada: “La clienta fue vetada de futuros vuelos de United mientras revisamos este asunto”.

Según lo que se escucha en uno de los clips publicados, un miembro de la tripulación le habría permitido a la mujer abordar, a pesar de mostrar un estado inconveniente antes del despegue: “Te di un abrazo porque me dijiste que tenías ansiedad; sabía que estabas bebiendo vino y no está permitido. Aun así, te dejé subir al avión”, dice.

La mujer, cuyo nombre no fue revelado, no solo retó a la tripulación cuando les respondió a las advertencias con un “vamos, aterricemos”, sino que también se mostró desafiante ante otros pasajeros. En una de las grabaciones se le escucha retar a un hombre que intentaba calmarla: “Dame una paliza”.

Entre las decenas de reacciones que generó el hecho en redes sociales, muchos usuarios hicieron énfasis en los enérgicos llamados del azafato para hacer que la mujer volviera a su asiento.

¿Qué pasó con el vuelo a LAX?

Finalmente, el vuelo 1813 llegó a su destino en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles en los primeros minutos del miércoles 26 de julio, con más de 90 minutos de retraso respecto a su itinerario original, según la bitácora del sitio FlightAware, pero con todos los pasajeros a salvo, excepto la mujer que comenzó el conflicto.

En una historia similar, recientemente se informó de un piloto estadounidense que fue sancionado luego de presentarse a trabajar en estado de ebriedad. El hombre debía viajar desde París, Francia, hasta Dallas, Texas, pero su falta de coordinación motriz lo delató. Al quedar en evidencia perdió su licencia profesional e incluso terminó en prisión y con una multa como reparación del daño a la compañía.

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