El tema de la tesina con la que Inés Zorreguieta se había recibido de psicóloga

Inés Zorreguieta, hermana de la reina Máxima de Holanda, fue encontrada muerta anoche en su departamento de la ciudad de Buenos Aires. Según indicaron fuentes del gobierno neerlandés a LA NACION, "se presume que se trató de un suicidio".

Inés, de 33 años, trabajaba como directora en el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales de la Presidencia. Se había recibido de psicóloga, en 2010, en la Universidad de Belgrano. Su tesina fue sobre género y suicidio.

"Las diferencias de género y su relación con el suicidio y las conductas vinculadas", es el título del trabajo, que define al suicidio como "un grave problema de salud pública mundial", e indica que "un millón de personan fallecen anualmente a causa del suicidio".

El problema de investigación del trabajo es que la tasa de suicidio no tiene igual distribución en hombres y mujeres. Tampoco la tasa de tentativas suicidas. Por un lado, "cometen suicidio cuatro hombres por cada mujer", indica el texto, mientras que "lo intentan cuatro mujeres por cada hombre".

Después de realizar un resumen de la evolución de la literatura académica sobre género, sobre suicidio y sobre el novedoso campo de la "suicidología", Zorreguieta dice que "la explicación más práctica respecto al por qué de las diferencias radica en la elección del método. Los métodos elegidos por los hombres son de alta letalidad -ahorcamiento, armas de fuego- en comparación a los elegidos por las mujeres -ahorcamiento, envenenamiento por drogas, cortes-".

¿Por qué los hombres eligen métodos de alta letalidad? Para la autora, la explicación se encuentra en las "expectativas de género".

"Las llamadas expectativas de género componen imágenes o modelos asociados que reflejan status ideales de la masculinidad y la femeneidad. Las predominantes para los hombres dictan que deben ser activos, valientes, orientados a la acción", dice el texto.

Por otro lado, las expectativas de género de las mujeres hacen hincapié en la "pasividad" más que en la "acción y el riesgo", y en otras cuestiones como "pensar en cómo lucirán una vez fallecidas". Este tipo de métodos, de baja letalidad, tienen una "ventana" de rescate posible más grande que los elegidos por los hombres.

Otros factores que pueden contribuir a la explicación son las "redes de apoyo" -las mujeres tienden a contar con más confidentes que los hombres-; las fuentes de stress -las mujeres tienden a soportar más el stress familiar, mientras que los hombres pueden reaccionar de manera más súbita frente a una crisis-; y la prevalencia psiquiátrica.

Inés Zorreguieta fue internada varias veces en la clínica Avril por depresión. También, luego de su adolescencia, por anorexia y desórdenes alimentarios. La misma psicóloga escribió en su tesina que la anorexia, que por expectativas de género "es padecida en su gran mayoría por mujeres", suele tener "un alto riesgo de suicidio".

Las causas de la muerte de Inés Zorreguieta son investigadas por la fiscal criminal y correccional porteña Cinthia Oberlander. Según indicaron fuentes policiales, en principio se habría matado ahorcándose con un cinturón en el picaporte de la puerta de su habitación.