En City Bell, Berna Luna proyectó ella misma una personalísima casa de impronta industrial, con lugar para trabajar a sus anchas.
“Me crié muy cerca de acá. Vimos este terreno de casualidad con mi marido, y nos encantó: está en medio de la nada; te permite mirar a lo lejos. Siempre imaginé una casa en altos con ambientes grandes donde recibir a mis hijos y nietos”, nos cuenta Berna Luna.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/VSKN6VSV55HTLPBFNWIVDO6DXM.jpg)
Esta pintora, dibujante y escultora de La Plata llegó con sus obras hasta Barcelona, Miami, Dallas y Nueva York, pero para la suma de los días eligió una porción alta y silvestre de City Bell. Autodidacta, creció entre bastidores inspirada por su mamá, la artista Miruh Almeida, de quien copiaba sus ejercicios de la carrera de Bellas Artes.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/TSVQL5LS4NFLVA55S5U5ZWLZB4.jpg)
La puerta es uno de los objetos más queridos de la casa. Conseguida en el desguace de una fábrica, se puso tal como llegó: con la pintura saltada y el graffiti que dice “Boca”.
Un gran espacio integrado
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/IUFZI6ZYBZGT3EE3CW6MXFXKBU.jpg)
Berna proyectó ella misma su hogar. “Por suerte, tengo un equipo que me interpreta sin bocetos. Porque este es un espacio creado y conceptuado como una de mis obras”.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/ZB7SDAPI2BCJJO2O5JABMLYBCY.jpg)
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/2CQMC6XJW5FKDPSAOVOXQA66AM.jpg)
“Hay mucho vidrio porque lo más importante era estar en contacto con el afuera desde cualquier lado y tener una galería gigante que pudiera integrar. Para mí, es un privilegio vivir así”.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/ZZJ2LJPZMRAKDOTFSWNY7XLQ74.jpg)
Rincón dilecto
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/C2PJPZMJNRCPNH5ZFLBDU7BHLA.jpg)
“¿Mi lugar? Junto a la chimenea. Disfruto el ritual desde ir a buscar leña y juntar las ramas hasta encenderlas. Me gustan mi taller y la cocina también. Pero si tengo que elegir, elijo el fuego”.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/4DC2O4STKJEOLLEAQ7BEEX5LLI.jpg)
Taller angelado
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/NTYTV7D2AVG5NFJI4EFDUSXSSY.jpg)
“Con caireles que compré hace años y la ayuda de la escalera que siempre tengo allí, hice una instalación. En breve, se irá a una vidriera que me invitaron a intervenir”. En términos de estilo, la apuesta es a una estética de lo genuino. “Me gusta que los objetos tengan un valor más allá de lo económico. Intento rodearme de cosas que elijo desde un lugar muy sentido”.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/RIHPYDSKHFHTRFJ5RHWHKF4G3A.jpg)
El modelo del cuadro sobre el que trabaja era la blusa de pintor de su mamá, que llevó a una enorme tela. “Cuando estaba empezando, me bloqueé; iba a borrar todo. De golpe, entró una mariposa y se posó sobre la percha donde estaba colgado el pintor. Creo que fue mi mamá, que bajó para acompañarme”.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/2W62BGK4BNFXTNIP6BROE6FTAI.jpg)
Donde habita la luz
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/YHOKB5SZCFEDFJPZN6JNDSE6IQ.jpg)
La luz, un bien primordial para un artista, está presente tanto en los espacios donde Berna trabaja como en los que reposa y, simplemente, habita.
La galería deseada
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/BBD7P5MFPREOFLAIMSESCSAPIY.jpg)
Berna Luna vive como pinta y esculpe: en libertad y rodeada de todo lo que la inspira, la naturaleza incluida.
:quality(80)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/lanacionar/RQUUYCSYTZA6JIAZTDEGP6ZIAE.jpg)